El Gran Premio de Austria fue un auténtico espectáculo a nivel de emociones tanto en la zona alta de parrilla como en el grupo intermedio pero en un día en el que hubo problemas de motor para los dos Mercedes, el Red Bull de Daniel Ricciardo, el Renault de Nico Hülkenberg y el Toro Rosso de Brendon Hartley, Carlos Sainz. vivió una carrera para olvidar. El español lo tenía todo de cara para firmar un sexto puesto tras los dos Haas, más veloces en el día de hoy, pero sus problemas con los neumáticos le dejaron sin recompensa. Carlos Sainz obtuvo el peor resultado de la temporada al ser duodécimo, su segundo cero después del llegado en el GP de Bahréin.
Para Sainz, la salida dejó claro que el domingo de Austria iba a ser un día difícil para él. Casi como el Red Bull Ring estuviera entregando una alegoría de la continuidad del español con Red Bull (con Ricciardo cada vez más cerca de renovar, Sainz quedaría definitivamente libre y seguiría en Renault), el piloto de Renault estuvo prácticamente siempre fuera de onda. En los compases iniciales, fue superado por varios pilotos y cayó hasta la duodécima posición. El abandono de Hülkenberg parecía devolverle no solo una posición sino también la posibilidad de adelantar a su compañero de equipo en la general si lograba ser noveno gracias al desempate. De hecho, a pesar de ser superado por Pérez poco después de la retirada de «Hulk», durante buena parte de la carrera parecía que los puntos no eran un sueño.
Llegó entonces el problema que afectó a buena parte de los pilotos participantes en la carrera, el famoso ‘blistering’. Las ampollas fastidiaron la carrera de un Sainz que se mostraba sorprendido tras bajarse del coche por un problema que según el piloto, nadie en Renault esperaba. Forzado a parar a boxes por segunda vez a pesar de haber llegado a estar en una octava posición teórica y víctima de un cambio de gomas lento por la dificultad de entrada del neumático delantero derecho, su retorno a la pista se produjo muy por detrás de lo deseado. La remontada final podría haber sido mejor y al término de la carrera, no logró escalar más allá de la duodécima posición.
Ha sido una pena, porque he salido muy bien pero luego me han echado y hemos perdido varias posiciones. Íbamos mejor con el superblando que los Force India, pero luego hemos puesto los blandos y hemos sufrido blistering. No veía nada en las rectas por las vibraciones. Todo esto nos ha impedido hacer nada. Tampoco podía girar el volante porque sobreviraba muchísimo. Hay muchas cosas que analizar y entender, porque ha sido una sorpresa para todos. Salí bien pero me han sacado para fuera. No había nada que pudiera haber hecho distinto, pero son cosas de las carreras. Con un buen ritmo, podríamos haber remontado pero teníamos tantas ampollas que era como conducir sobre hielo.
