Tocó la de arena para Fernando Alonso en la segunda etapa. El asturiano se encontraba realizando buenos cronos en los primeros pasos por los Waypoints, sin embargo, en el kilómetro 160 golpeaba una roca y una de las ruedas de la Toyota Hilux V8 4×4 quedaba dañada, lo que obligaba al bicampeón del Mundo de Fórmula 1 y a Marc Coma a trabajar en reparar su vehículo para así poder continuar en carrera sin necesidad de esperar al camión de asistencia pilotado por Francesc Ester.
Ya lo había avisado: no sería fácil y especialmente con el polvo en suspensión, un elemento al que está muy poco acostumbrado Alonso debido a su procedencia deportiva. Hoy le tocó pagar la novatada rodando tras el polvo de Erik Van Loon y encontrándose una piedra que dañaba un trapecio de la suspensión delantera y una de las ruedas.
Ha sido una etapa seguramente difícil. La navegación era complicada, pero Marc [Coma] estuvo perfecto hoy. Tuvimos una buena etapa también en ese sentido, también en ritmo cuando teníamos visibilidad, pero fuimos 100 kilómetros detrás de otro coche y no te puedes acercar. En uno de esos momentos, tocamos algo con la rueda delantera y tuvimos que hacer una reparación grande, así que sensaciones buenas en cuanto a feeling y navegación, y no tan buenas en cuanto a resultado, porque perdimos muchísimo tiempo. En fin, gracias a Dios estamos aquí, seguimos en el rally y el objetivo de llegar a Riad dentro de unas semanas sigue intacto, así que contento por eso – Fernando Alonso
Tras comprobar que eran capaces de reparar el estropicio con lo que llevaban en el coche, se pusieron manos a la obra con las instrucciones del equipo a través del teléfono y llegaban a meta con 2 horas, 34 minutos y 38 segundos perdidos, una losa que obviamente les complica mucho estar entre los 10 primeros el próximo 17 de enero.
Bridas, cinta americana y alguna que otra reparación de emergencia. «Nos quedaban 120 kilómetros para el final en los que íbamos sin frenos delanteros porque hemos tenido que cortar el circuito delantero, así que hemos tenido que hacer con un poco de cuidado«. Una primera pesadilla que vuelve a servir para reflejar lo complicado que es no solo ganar el Rally Dakar, sino que las dificultades que debes superar o evitar para llegar a la meta.
Carlos Sainz e Hinojo fueron las grandes noticias:
Carlos Sainz de nuevo volvía a dar la de cal, todo ello a pesar de que se han perdido hasta en dos ocasiones y han tenido que regresar unos 3 kilómetros atrás. Después de esquivar los pinchazos (ayer sufrió uno y hay que tener en cuenta que los buggies solo pueden llevar dos ruedas de repuesto) en esta segunda etapa, el madrileño, navegado una vez más por Lucas Cruz, llegaba a meta de nuevo en las primeras posiciones, lo que le permitía escalar a la segunda posición con apenas 4:43 minutos perdidos respecto a Orly Terranova. Álex Haro sería el otro gran protagonista español en coche al llevarse la victoria de etapa copilotando a Giniel de Villiers.
La etapa de hoy no estaba yendo mal, pero es muy difícil la navegación. Hemos abierto una parte de la etapa y al final hemos perdido muchos minutos. Hemos tenido que dar media vuelta dos veces. No encontrábamos el camino. Luego lo hemos conseguido, pero hemos perdido mucho tiempo – Carlos Sainz
En una jornada en la que Laia Sanz también se caía después de golpear una piedra cuando rodaba tras el polvo de otro competidor, completando la etapa con más de 43 minutos perdidos y dolor en la cadera, Nani Roma y Dani Oliveras completaban una gran actuación al ser undécimo con el Borgward, mientras que es José Antonio Hinojo en Side-By-Side se ha colado por segundo día entre los mejores, situándose cuarto de la etapa tras ser tercero el domingo con su Can-Am Maverick X3. José Luis Peña y Gerard Farrés serían las noticias negativas de la armada española entre los UTV al dejarse más de hora y media este lunes de Reyes Magos
Joan Font sigue en carrera después de romper ayer la barra estabilizadora delantera en su Land Cruiser 120 y tener que reducir el ritmo cuando cayó la noche, llegando a meta después de 10 horas y habiendo completado los últimos 170 kilómetros con el palier dañado y en plena oscuridad. Una pesadilla para un piloto que está haciendo de mochilero para los tres buggies del equipo FN Speed. Aunque sin duda el gran cataclismo sería para los hombres de GPR, los cuales sufrieron en las tres unidades problemas de motor que les obligaban a abandonar y a tener que reintegrarse ya fuera de la clasificación general de SSV, aprovechando el joker del que disponen los pilotos que no son élite y que pueden beneficiarse de la denominada como Dakar Experience. Hoy no han competidor ya que no han tenido suficiente tiempo para reparar, por lo que disponen hasta pasado mañana para poder reengancharse.