Sólida carrera para Carlos Sainz y Fernando Alonso en Interlagos en un Gran Premio de Brasil que mostró el buen hacer de ambos en situaciones en las que habría sido fácil quedar con un mal resultado en un momento en el que sus equipos necesitan los puntos como agua de mayo. Carlos Sainz mantuvo el tipo tras una complicada salida y acabó en sexta posición, mientras Fernando Alonso supo recuperar varias posiciones gracias a una estrategia más conservadora para acabar llevándose la novena posición. En ambos casos, los pilotos españoles terminaron justo por detrás de sus respectivos compañeros de equipo con Charles Leclerc quinto y Esteban Ocon octavo.
La carrera corta del sábado tuvo historias muy distintas para los dos pilotos españoles. Carlos Sainz daba la sorpresa positiva con una elección de neumáticos blandos que le permitía hacerse con una espectacular tercera posición después de haberla defendido con ahínco de los pilotos que le perseguían. El madrileño se enfrentaba a una sólida opción de sumar buenos puntos. Mientras tanto, Fernando Alonso se tenía que conformar con ser duodécimo, algo que con el ritmo complicado del Alpine no planteaba una posición favorable para el asturiano, obligado a remontar en la medida de lo posible.
El momento de la salida tenía que ser crucial, especialmente para Sainz, teniendo en cuenta que por delante solo tenía a Bottas y a Verstappen. Sin embargo, el madrileño no acertó la arrancada y perdió un tiempo crucial que le llevó a contactar con Norris y a caer hasta la quinta posición. Ni siquiera ese puesto le duró demasiado, con un Hamilton desatado que relegó a Sainz al sexto puesto en pos de una remontada que acabaría en victoria. Por su parte, Alonso subía a la undécima posición por los problemas de Norris, que acercaban al piloto de Alpine a la zona de puntos a la que tenía que optar.
Tras el periodo de Safety Car por el toque entre Stroll y Tsunoda y el periodo de Virtual Safety Car llegado poco después al soltarse piezas del coche de Schumacher, Alonso acabó siendo superado por Stroll, cayendo a la duodécima posición. Llegada la vuelta 21, Alonso se situó en undécima posición mientras los pilotos empezaban a mirar hacia sus primeras paradas. Sainz lo hizo en la vuelta 27, con un Leclerc que lo hacía dos vueltas después pero volvía a pistar por delante. Sainz estaba entonces por detrás de Alonso pero en la sexta posición teórica que se confirmó tras el paso del asturiano por boxes en la vuelta 35.
El bicampeón del mundo volvió a pista en décimo cuarta posición pero poco a poco iba recuperando. Tras todas las paradas, el asturiano era ya séptimo, posición a la que optaba en caso de no volver a parar. Mientras Sainz realizaba su segunda parada en la vuelta 54, con una buena gestión de gomas, Alonso iba a llegar hasta el final sin volver a cambiar neumáticos aunque eso significaba que tenía que defenderse de los ataques de un Gasly que venía mucho más rápido en los compases finales. En la vuelta 62 el galo se impuso y se ganó la séptima posición. Para acabar la jornada, en la última vuelta Alonso cedió su posición a Esteban Ocon por órdenes de equipo al haber priorizado antes la escuadra al español.
Este resultado deja a Ferrari con 31,5 puntos de ventaja sobre McLaren, lo que con tres carreras por delante ya es bastante prometedor. Por su parte, Alpine sigue empatada a puntos con AlphaTauri pero con el desempate favorable por la victoria de Ocon. Ambas peleas prometen emociones fuertes en lo que resta de temporada…