Parecía un prometedor arranque para Ferrari, dominando la primera sesión de entrenamientos libres del Gran Premio de Arabia Saudí con un tiempo de 1m 30.772s con el compuesto blando justo cuando se encaraba los últimos compases de la FP1. Tras él llegó Max Verstappen, segundo más rápido por delante de los monoplazas de Valtteri Bottas y Carlos Sainz, con los cuatro primeros apenas separados por únicamente tres décimas y seguidos no muy lejos también ese Top5 por los pilotos de AlphaTauri. Las sensaciones en la FP2 sin duda serían peores para muchos de ellos en este grupo delantero.
Curiosamente los de Faenza terminaron por delante del segundo Red Bull, con Checo Pérez séptimo, Esteban Ocon como mejor Alpine en la octava plaza y Lewis Hamilton noveno. Para el británico fue un día de quebraderos de cabeza (nunca mejor dicho), ya que, al igual que Carlos Sainz comenzó la sesión sufriendo de mucho porpoising y terminó la FP1 tocando el muro en la primera curva.
Tampoco había buenas noticias para Alonso, el cual además de ser décimo, debía estrenar motor ya que Alpine había fletado la unidad de potencia Renault de nuevo a Viry para que fuera analizada después de encontrar un problema con el sellado, algo que ya les trajo de cabeza durante la pretemporada. En concreto cambiaban cinco de los siete elementos: ICE, Turbo, el MGU-H y MGU-K y los escapes. La nota curiosa la pondría Lando Norris, el cual terminaría por romper uno de los carteles marcadores de las referencias de frenada que había sido tirado por el viento. Los restos dejados obligaron a sacar la bandera roja, demostrando una vez más el lento proceder de los comisarios en esta cita.
Acabamos ya los últimos minutos de la FP1 con preocupación. El propio Max Verstappen se daba cuenta de un fuerte olor a quemado que rápidamente desde el box, su ingeniero Gianpiero Lambiase, le confirmó que no pertenecía a su RB18. Todo apuntaba a la densa humareda que se veía desde el propio circuito proveniente de una refinería de la compañía Aramco (patrocinador de Aston Martin y de la Fórmula 1), muy próxima al circuito de Jeddah Corniche.
No tardaría demasiado en conocerse que se había tratado de un ataque con misiles, ante al que al parecer habían respondido las contramedidas de las que dispone la ciudad ante estos casos, sin embargo, uno de ellos logró acertar en el que parecía que era el objetivo principal. Un grupo hutí no tardaría en confirmar la autoría de dicha acción, en este caso a través de Yahya Sarea, portavoz de los rebeldes.
Esta situación tuvo incidencia directamente también clasificación de la Fórmula 2, donde además de las banderas rojas que hubo por varios toques contra los muros, también pudimos ver una más en la que el coche médico salió a dar una vuelta a pista rompiendo por completo cualquier protocolo al que nos tenga acostumbrados el Campeonato del Mundo de Fórmula 1.
A harrowing image as an oil facility local to the #SaudiArabiaGP circuit burns, with those involved with the Houthi movement allegedly claiming responsibility for the attack.
An emergency meeting was held which delayed #F1‘s FP2, addressing driver concerns.
📸: DPPI pic.twitter.com/TUxe6cbmR9
— Motor Sport magazine (@Motor_Sport) March 25, 2022
Clasificación FP1 – Gran Premio Arabia Saudí 2022:
Los pilotos pendientes de los ataques, Ferrari al muro:
El inicio de la FP2 por tanto también se vería retrasado. En principio fue apenas un cuarto de hora, ya que los competidores se encontraban reunidos para conocer la situación y en un anticipo de una nueva asamblea que se realizará esta noche en la que estarán presentes los jefes de equipo y en las que se espera también la asistencia de autoridades locales. Debemos recordar que el ePrix de Ad Diriyah de 2021 ya estuvo marcado por una acción similar, mientras que en el Dakar 2022 hubo en su antesala un atentado contra uno de los coches de asistencia de uno de los equipos.
Con toda esta inquietud no fue de extrañar el ver a los competidores cometer más errores sobre el asfalto, con los dos Ferrari tocando el muro con sus respectivos F1-75. En el caso de Charles Leclerc, líder del Mundial, fue ligeramente más contundente el impacto que el que tuvo Carlos Sainz, dañando una bieleta de la dirección y obligándole a regresar a boxes a una velocidad muy reducida. Se rompía esa racha de los del cavallino, obligándoles a terminar antes de tiempo la FP2 y quedándose por tanto sin probar a fondo la velocidad a una vuelta que tiene el monoplaza protagonista del doblete en Bahréin. En el caso del monegasco es un error más en un circuito urbano, seguramente uno de sus mayores talones de Aquiles dentro de la Fórmula 1, con toques tanto en Mónaco, como en Bakú, o el vivido también en Jeddah el año pasado.
Habría más actividad en pista, incluidos los problemas de HAAS, que después de terminar la FP1 con Kevin Magnussen haciendo dos vueltas de instalación y con Mick Schumacher con el tiempo más lento de los realizados, aquí se encontraban como el monoplaza del danés le dejaba tirado tras notar una pérdida de potencia y que desde el box le pidieran que tirara. Mejor McLaren con sus dos pilotos, en una situación diametralmente opuesta a la de Aston Martin y Williams, con muchas dificultades para colarse entre los 10 primeros.
A pesar de estar fuera en los últimos minutos, Charles Leclerc se llevaba de nuevo el mejor tiempo por delante de Max Verstappen, Carlos Sainz, Sergio Pérez y los dos Mercedes en lo que parecía una buena muestra de balance de fuerzas entre las principales escuderías, a las que se sumaría también un prometedor arranque de McLaren con Lando Norris en la séptima posición por delante de Esteban Ocon con el Alpine y de Valtteri Bottas con el Alfa Romeo. La acción terminaba con varios sobresaltos, entre ellos las nuevas explosiones producidas alrededor de la ciudad y el problema mecánico en el motor de Tsunoda que puede empezar a crear grandes preocupaciones en AlphaTauri y en Red Bull por la fiabilidad de las mecánicas heredadas de Honda.
Clasificación FP2 – Gran Premio Arabia Saudí 2022: