Christian Fittipaldi, quien está próximo a cumplir 48 años de edad, hace algunos meses atrás comunicó que ha decidido ponerle punto final a su trayectoria profesional como piloto al culminar las 24 Horas de Daytona. Con experiencia en la Fórmula 1, CART, NASCAR, Sport Cars y Stock Car brasileño, Fittipaldi retorna a Daytona para intentar reeditar la victoria de 2018 puesto que anhela ganar la exigente prueba por cuarta ocasión para así despedirse de las pistas por la puerta grande.
Tras su paso por la Fórmula 1, donde estuvo desde 1992 hasta 1994 con las escuderías Minardi y Footwork, Christian Fittipaldi desembarcó en Estados Unidos, allí pudo desarrollarse como piloto en muchos aspectos. En la CART se mantuvo durante ocho años, para luego dedicarse a otras categorías, principalmente a los coches deportivos, donde ha sido uno de los más destacados en la última década. Campeón en la IMSA WeatherTech SportsCar en 2014 y 2015, ha participado en trece ediciones de las 24 Horas de Daytona, resultando ganador en 2004, 2014 y 2018. Desde 2011 forma parte del equipo Action Express Racing y junto a los pilotos portugueses João Barbosa y Filipe Albuquerque ha constituido una alineación que siempre ha estado involucrada en la lucha por las victorias.
Según manifestó el piloto brasileño, el volver a Daytona le genera sensaciones encontradas ya que por una parte está consciente de que será su despedida como piloto profesional, así que siente cierta tristeza, pero también está presente la emoción de competir en un DPi representando a Action Express, luciendo los colores de Mustang Samplig Racing, que tantas satisfacciones le ha traído. Fittipaldi siempre tiene presente el instante cuando Iain Watt, ingeniero de Action Express, le llamó en 2010, cuando estaba en el Stock Car brasileño, y le pidió que se uniera al equipo, eso fue como un nuevo comienzo para su carrera.
Estoy triste y al mismo tiempo estoy feliz, no voy a mentir. Estoy en paz conmigo mismo, y eso es lo más importante. Sin lugar a dudas, voy a extrañar todo esto, pero cada vez que cierras un capítulo de tu vida, se abre otro. Ahora es el momento de cerrar este capítulo y abrir otro. Ahora estoy trabajando de la misma manera que lo hago en un fin de semana de carrera, es mi obligación profesional. Pero me doy cuenta de que para mí será bastante emotivo. Ganar sería como el final de un cuento de hadas, eso es obviamente por lo que nos estamos esforzando.
Vía | Racer