Christian Horner no se escondió. El británico, Team Principal de Red Bull Racing llegó a Jeddah para dar la cara una vez más precisamente en el día que se ha podido saber que la empleada que presentó la denuncia sobre él había sido suspendida por el equipo. No son días sencillos para el mandamás de los vigentes Campeones del Mundo, todo ello a pesar de que su equipo comenzó con doblete hace una semana en Bahréin y que vuelven a ser los grandes favoritos a llevarse ambos títulos en esta temporada 2024.
Horner asistió durante la tarde a la rueda de prensa para tratar de cortar de raíz todas las informaciones que no son correctas en torno a su figura, algo que ha ido escalando especialmente después de que Jos Verstappen, el padre de Max, públicamente pidiera su salida del equipo antes de que la escudería “estallara”. Desde entonces, los rumores en torno a la figura de Max y una posible marcha de Red Bull a Mercedes-AMG F1 siguieron cobrando fuerza para aumentar la presión a su vez sobre Christian.
Fueron días duros para Horner, con una parte de Red Bull descontenta por su continuidad (la otra, la tailandesa, le ha dado su apoyo a través de Chalerm Yoovidhya) aparentemente según los rumores, con Ford, futuro socio de motores de los de las bebidas energéticas, pidiendo explicaciones y con gran parte del paddock pidiendo claridad sobre el caso incluso después de que se diera carpetazo a la investigación a mediados de la semana pasada. Incluso la presencia de Bruno Famin, responsable de una Alpine en horas dramáticas, pasó desapercibida ante el aluvión de preguntas que cayeron sobre Horner. Once de las 13 preguntas que hicieron los periodistas fueron para él.
Quizás una de las cuestiones clave fue la que recaía en cuestión del futuro de Max Verstappen en Red Bull. Esa fue precisamente una de las respuestas más concisas, confirmando que había hablado con Jos Verstappen tras la crítica que este le realizó en el Daily Mail el pasado sábado: “Lo felicité (a Jos) por la victoria de su hijo. Por el interés colectivo, decidimos seguir adelante y mirar plenamente hacia el futuro. De todos modos, es lo mejor para su hijo. Max ganó tres títulos del campeonato mundial con nosotros, tiene un total de 55 victorias, lo que nos acercó a Williams en el número de victorias en Grandes Premios. Hemos estado mirando hacia el futuro desde este debate en Bahréin”. Algo más esquivo fue en materia de su gran polémica tras ser acusado de conducta inapropiada por otra integrante de la estructura.
Se ha presentado una denuncia. Fue investigada a fondo. Y fue rechazada. A partir de ahí avanzamos. Hay un proceso confidencial entre las partes interesadas. Todos estamos sujetos a las mismas restricciones. Por este motivo no puedo hablar del asunto, aunque quisiera. Esto tomó grandes proporciones, ya que hubo filtraciones a los medios, lo cual no fue fácil de afrontar para mi familia. Vi que algunos habían intentado aprovecharse de esto. La F1 es un entorno competitivo y ese no es necesariamente el mejor lado de nuestra industria. No se trata de una preocupación vinculada a la F1 o a la FIA, sino a una empresa – Christian Horner
Esta situación de seguridad mostrada por Horner este jueves, contrasta con la noticia de que la autora de la denuncia ha sido suspendida por Red Bull tal y como informó el medio británico The Times. A partir de recibir la notificación por parte de la empresa y sabiendo que está suspendida de empleo y sueldo, tendrá cinco días para presentar una apelación. Según informó el tabloide The Sun, la empleada estuvo preparada para viajar a Bahréin la semana pasada de cara a asistir al primer Gran Premio de la temporada, sin embargo, en la escudería quisieron evitarlo.
La situación ha sido tan rocambolesca que, incluso es cuanto menos ‘peculiar’ ver cómo Red Bull Content Pool llenó de imágenes su acceso de imágenes para la prensa de la entrada de la pasada semana en Bahréin de Christian Horner del brazo de su esposa, Geri Halliwell. Se puede hablar de la forma discreta que ha tratado hasta el momento la firma de las bebidas energéticas el caso, otros podrán apuntar al oscurantismo con el que se está llevando una situación cuanto menos peliaguda dentro de una escudería que hasta hace un mes parecía tenerlo todo completamente controlado.
Fue un momento difícil. Estoy casado, tengo tres hijos y cuando esta intrusión afecta a tus hijos, es duro. Tengo mucha suerte de tener una familia maravillosa y una esposa que me apoya. Es realmente difícil, porque cuando afecta a la familia, nunca es bonito. La realidad es que hubo una queja y fue manejada muy profesionalmente. No por el equipo, sino por el grupo, Red Bull – Christian Horner