La llegada a la decisión de la temporada regular la Xfinity Series reafirmó el favoritismo de los tres pilotos punteros del certamen: Christopher Bell, Cole Custer y Tyler Reddick, todos ellos representantes de una marca y candidatos (si no ya confirmados) a dar el salto a la Cup Series en 2020. Bell es el más rápido del trío pero sus irregularidades pueden costarle caro, Custer da sensación de solidez y de velocidad indiscutible y el vigente campeón Reddick ha sabido usar la estrategia y los elementos a su favor en carreras que no tenían buena pinta.
Austin Cindric había ganado las carreras de Watkins Glen y Mid-Ohio y también apareció en la pelea por la victoria en Road America, dónde A.J. Allmendinger y Matt DiBenedetto destacaron con experiencia desde la Cup Series. Justin Allgaier y Brandon Jones se salieron de pista y pincharon neumáticos al final del primer segmento y Custer dañó su motor en una excursión; Allgaier y Custer sacaron top 10 y Jones quedó cerca a pesar de sufrir un segundo pinchazo. Bell obtuvo el triunfo frente a Cindric y Reddick, viéndose perjudicados Allmendinger (24º tras ser echado en el Overtime) y DiBenedetto (accidentado en la última curva cuando iba segundo).
La extraña cita de Darlington vio el dominio partido de Reddick y Ryan Blaney, invitado ocasional que empezó mandando y al que sin embargo le costó pasar al vigente campeón en el duelo directo sobre el asfalto. Custer y Denny Hamlin siguieron al Penske en las vueltas decisivas, llegando Hamlin a adelantar a todo el pelotón hasta ponerse primero y contener los ataques del ansioso Custer en la parte final. Pero el Toyota no pasó la inspección post-carrera al estar demasiado alto o bajo en distintos sitios y Hamlin fue descalificado, ganando Custer a Reddick, Blaney, Bell y al provisionalmente regresado Dale Earnhardt Jr.
La acción se apretó en Indianápolis, circuito dónde el pack de aerodinámica reducida ayuda irónicamente a los coches de la Xfinity Series. Kyle Busch, Bell y Jones lideraron al principio antes de verse alcanzados por Allgaier, Reddick, Cindric y Jeb Burton. Allgaier y Busch se intercambiaron el liderato en varias ocasiones y varias cautions cerca del final (entre ellas un empujón mal calculado de Cindric a Jones y un accidente entre Bell y Reddick cuando eran primero y segundo que causó una bandera roja). Burton ayudó en la resalida decisiva a Busch, que aguantó a Allgaier en su retrovisor en el momento de la verdad.
Finalizó la temporada regular en Las Vegas, ronda desértica de carácter olvidable excepto en la siempre cambiante parte final ante el dominio de Bell. Las distancias del joven de Gibbs en cabeza llegaron a rozar los seis segundos y nadie pudo toserle por velocidad pura, no así por estrategia con la falta de accidentes. Reddick entró durante una caution y llenó el depósito, ahorrando gasolina y una parada final casi obligada para ponerse primero. Bell recortó casi toda la distancia pero no pudo pasar al Childress, que ganó con menos de un segundo de margen y se apuntó con fuerza al playoff en su quinta victoria del año, a solo una de las seis de Custer y Bell.