Quizás fue lo más comentado durante la pretemporada. Antes del inicio del Rallye de Monte-Carlo y de comprobar lo competitivo que era el tándem Hyundai i20 WRC Coupé pilotado por Thierry Neuville, muchos destacaron que tanto el Citroën C3 WRC, como el nonato Volkswagen Polo R WRC, eran los coches sobre el papel más conversadores en su diseño. Tras las 10 primeras citas del Mundial de Rallyes, tan sólo el podio en Alemania y la victoria en México permiten al equipo de los dos chevrones ver algo de luz en la temporada de su regreso.
Sin embargo, este sigue siendo bagaje escaso no sólo para la competitividad histórica que ha tenido la firma gala, sino también para los recursos destinados por el fabricante y su patrocinador principal, Abu Dhabi, el cual se rumorea que aporta hasta 10 millones de euros por temporada al equipo “Red”. Es por ello que los de Yves Matton ya han comenzado a trabajar en preparar el coche de la próxima temporada. No se esperan novedades técnicas en el Citroën C3 WRC durante lo que resta de año, por lo que todos los esfuerzos están destinados en 2018.
Después de gasta los primeros jokers en la transmisión y la entrega de potencia de cara al Rally de Polonia, el equipo ha seguido probando con otras configuraciones y proveedores de suspensión, especialmente sobre tierra, terreno en el que el C3 WRC ha mostrado un rendimiento inferior y una maniobrabilidad en ocasiones errática que ha desconcertado a sus pilotos. En las declaraciones concedidas a Autosport, Matton reconoce que es el momento de correr riesgos y traer piezas que les permita dar pasos adelante, aunque esto implique la necesidad de montarlas sin haber sido testadas con la misma minuciosidad con la que acostumbra a trabajar Citroën. A buen seguro veremos una versión muy distinta del World Rally Car de los de Versalles en el próximo Rallye de Monte-Carlo 2018.
Ya corrimos riesgos con el desarrollo. Puedo decir que desde Suecia hemos estado trabajando más y más duro y realmente miramos hacia la próxima temporada. Ese es el objetivo en el que actualmente el equipo está centrado. Pero tenemos que tomar más riesgos y poner más piezas nuevas en el coche con menos tiempo para validarlas. No es la forma en la que habitualmente hacemos las cosas, pero es la única manera que tenemos de trabajar respecto al programa para llegar al inicio de la próxima temporada.
Vía | Autosport
