La ciudad del amor, la ciudad de la luz y este fin de semana, la ciudad de Citroën. París se deja llevar este fin de semana por el centenario de la firma de los dos chevrones y ha sido completamente inundada por el pasado, presenta y futuro del fabricante. Si encontrar aparcamiento en la capital francesa se convierte en toda una odisea, este fin de semana los vehículos de Citroën han encontrado un lugar de excepción para descansar en una exhibición a cielo abierto que tan solo durará este fin de semana del 15 al 16 de junio.
El lugar elegido es de excepción. En total 400 metros de la rue Lionis, en el centro del barrio cuenta ambas aceras plagadas por un centenar de vehículos icónicos y representativos de los 100 años de historia de Citroën: desde el Type A hasta algunas de las propuestas más recientes entre las que se encuentran los Ami One Concept y 19_19 Concept. La elección del escenario no ha sido aleatoria. ¿Por qué París? Porque allí, en junio de 1919 se presento el Type A y, ¿Por qué esta localización? Porque nos encontramos a solo unos metros de Seine, el lugar en el que estaba establecida la antigua factoría de Javel.
4 concept cars, 74 modelos emblemáticos, 14 vehículos de competición, 5 modelos del catálogo actual y otros tres vehículos que simbolizan la aventura del automovilismo. Una vez más destaca el mismo con el que Citroën trata todo este tipo de recuerdos a su historia, especialmente en el apartado de las carreras, donde cuenta con algunos representantes como el Citroën Xsara Kit Car de Philippe Bugalski y el WRC de Sébastien Loeb, el Citroën C3 R5, el World Rally Car actual de Sébastien Ogier y el C2 S1600 con el que obtuvo el título del JWRC, el ZX Grand Raid del Dakar, el AX Superproduction o el Citroën C-Elysée TC1.
Por si a alguien le parece poco, en el resto de vehículos de producción nos encontramos con joyas como el Citroën Saxo VTR, un XM, el Xantia Activa, un Méhari, numerosas variantes del 2CV e incluso el conocido como “Tiburón”. Abstenerse nostálgicos, pero quizás sea un buen fin de semana para dejarse llevar por una París aún más bella que de costumbre.
