La IndyCar siguió avanzando en lo que respecta a la introducción del motor híbrido para la próxima temporada y en tal sentido, tanto Honda como Chevrolet mostraron satisfacción tras analizar los resultados de las recientes pruebas en Sebring. Will Power y Scott Dixon fueron los encargados de pilotar monoplazas de prueba, acondicionados para llevar los motores V6 biturbo híbridos, y entre ambos completaron más de 800 vueltas, es decir recorrieron aproximadamente unos 2.250 kilómetros, sin presentar mayores inconvenientes.
Power, con el Penske Chevrolet número 22, y Dixon, con el Ganassi Honda número 93, pudieron constatar las virtudes de la potencia adicional de 150 caballos que ofrecen las baterías que se recargan a través de los frenos, tal como actúa el MGU-K en la Fórmula 1. Esta dirección que toma la IndyCar apunta hacia su modernización ya que tras la introducción del propulsor híbrido en el 2024 vendrá un nuevo chasis, dejando atrás al Dallara DW12 que ha estado vigente por más de una década. Durante la realización de las pruebas se iniciaron las discusiones acerca de la potencia y eficiencia, para así planificar lo que serían las nuevas estrategias de carrera.
En el circuito de Florida, con una temperatura rondando los 32°C y un alto porcentaje de humedad en el ambiente, tales condiciones resultaron propicias para evaluar el desempeño de la tecnología híbrida bajo un fuerte calor. Para Scott Dixon todo resultó según lo esperado, la propuesta técnica que llevó Honda la observó ligera, compacta y eficiente, características que también se buscan en la producción comercial. En las pruebas también participó Shell, proveedor exclusivo de la IndyCar que esta temporada presentó un combustible 100% sostenible.
En palabras de Will Power:
Siempre estoy emocionado de probar algo nuevo Jugué un papel decisivo en la prueba del nuevo coche híbrido en Indianápolis, sin regeneración de energía. Todo esta bien aquí, no hemos tenido ningún problema y ahora hemos agregado regeneración de energía. Todo va tal como lo habían planeado los ingenieros.
Vía IndyCar