ESPACIOS
COMPETICIÓN
Cerrar CERRAR
Competición

6 MIN

Control Stop. ¿Quién salió satisfecho del Rallye de Córcega?

Tras años en los que una sola marca ha monopolizado por completo las victorias, no bajando nunca de los 10 triunfos por cada temporada, el Mundial de Rallyes de 2017 ha empezado ya oficialmente con la que es una de las temporadas más abiertas en cuanto al rendimiento de los coches que nos hemos encontrado en la era moderna del campeonato. Es cierto que hace treinta años, en la década de los ochenta con los Grupo B (la última vez que se dieron cuatro ganadores distintos fue en 1986), o incluso anteriormente con los Grupo 4, era habitual encontrarnos en el cuadro de las victorias con gran variedad de modelos y marcas.

SI bien no parece que haya un claro dominador entre las máquinas, sí lo hay entre pilotos. Ni el cambio a M-Sport, ni los problemas de todo tipo que está sufriendo el Ford Fiesta WRC, ni tan siquiera los errores propios que se han sucedido durante este inicio de campaña, han evitado que Sébastien Ogier vuelva un año más a dominar la categoría. Cuatro rallyes, cuatro podios. Nadie más puede presumir de unas cifras de este calibre y esto se traduce al final de año en decenas de puntos a pesar de que el francés no esté ganando tanto como acostumbra.

Aquí se encontró posiblemente con el rally más difícil de lo que llevamos de temporada. No sólo por los muchos problemas de distinta índole que le acosaron, sino también porque estaba perdiendo el triunfo frente a sus compatriotas. La base del coche sigue siendo buena, el chasis es el más que piropeado por casi todos los pilotos que han pasado por su volante, sin embargo, parece que se está quedando un paso por detrás del resto. Malcolm Wilson confirmaba el jueves que habrá esta misma semana cinco jornadas de test de las 54 disponibles para poner a punto el coche antes de viajar a rallyes como Argentina y Portugal. Posiblemente una forma de calmar también a un muy enfadado Sébastien Ogier que había logrado salvar la segunda posición después de que Dani Sordo no tuviera en esta ocasión el ritmo suficiente para defender los 2,5 segundos de ventaja que tenía sobre el de M-Sport en su terreno favorito.

Si echamos un vistazo a la general final y a las circunstancias que llevaron a dicho punto, prácticamente ninguno de los equipos se fue de la isla corsa con una sensación de plenitud. Hyundai consiguió la victoria gracias a que esta vez sí, Thierry Neuville estaba en el lugar adecuado en el momento indicado, aprovechando el abandono de Kris Meeke y a partir de ahí realizando una actuación sin fisuras. Sin embargo, a los hombres de Michel Nandan se les escapó el doblete, no mostraron esa superioridad que sí tuvieron en Monte-Carlo y Suecia hasta los dos errores del piloto belga, y en esta ocasión, ni Hayden Paddon ni Dani Sordo se encontraron cómodos sobre el asfalto.

Habría que tirar de hemeroteca para encontrar un rally sobre asfalto, y especialmente Córcega en el que Sordo tuvo actuaciones sobresalientes en el pasado, para encontrarnos una cita sobre alquitrán en la que el cántabro no consiguiera al menos un scratch en una de las especiales. En las palabras del neozelandés también se deslizaba un claro sentimiento de impotencia al no verse entre los tiempos de cabeza a pesar de haberse preparado compitiendo en San Remo sólo unos días antes. Todavía queda mucho aprendizaje, el mismo que han tenido que realizar hombres como Jari-Matti Latvala.

Toyota precisamente fue otra de las que salieron de Córcega con un sentimiento extraño. Muy valiosa la cuarta plaza de Jari-Matti conseguida prácticamente sobre la campana, sin embargo, Tommi Mäkinen se encuentra con la papeleta de tener a un Juho Hänninen que no termina de encajar. El finlandés contestaba a las preguntas en invierno sobre si estaba contento de tener una segunda oportunidad en el Mundial de Rallyes con un rotundo: “¿Cuál fue la primera?, destacando que en Hyundai no le habían dado ocasión para mostrar su talento. Sin embargo, el ganador de la triple corona entre los S2000 (IRC, ERC, SWRC) no está sabiendo en esta ocasión aprovechar tampoco la posibilidad de apretar las tuercas al recién llegado Latvala con un coche que ha sido desarrollado por él, y que por lo tanto conoce mejor que el ex-piloto de Volkswagen. Y mientras tanto, las semanas pasan, Mikkelsen sigue ganando en WRC2 y no hay anuncio oficial sobre si Esapekka Lappi estará o no finalmente en Portugal o Cerdeña al volante de un Yaris WRC.

M-Sport sintió cierto alivio al ver cruzar la meta a Sébastien Ogier en segunda posición, pero el fin de semana de los de Cumbria fue muy duro. No sólo en la categoría absoluta, donde tuvieron el abandono de Ott Tänak y los graves problemas hidráulicos en el coche de Elfyn Evans, sino también en WRC2, donde se quedaron sin Eric Camilli muy pronto. El francés está intentando plantar cara a los Skoda oficiales con el material del que dispone, y eso se traduce en ir siempre al límite. Se espera que los pilotos oficiales de M-Sport y los que compiten en esta segunda división del WRC, puedan disponer de la nueva Evo2 para Portugal, algo que complica a su vez que Cristian García pueda disponer de la misma para Canarias.

Por último, Citroën. Tras el susto de México, aquí los tiempos de Kris Meeke dieron vida al conjunto de los dos chevrones. Tanto que incluso se vieron en disposición de romper el ‘récord’ de cuatro equipos/pilotos distintos ganando las cuatro primeras pruebas. Sin embargo, una fuga de aceite provocó la fumata blanca que Meeke recordará las próximas semanas. Breen se aprovechó de los múltiples abandonos para terminar en el Top 5, mientras que Lefebvre sigue estando un paso por detrás. De pasar de una posible victoria, a tener que conformarse con la quinta plaza. No se puede calificar el positivo en casa de los galos.

En cuanto al resto, WRC2 no tuvo más historia a partir del adiós de Camilli a la carrera, el propio Mikkelsen reconocía que había mantenido una estrategia de control desde el viernes, mientras que en JWRC, Nil Solans realizó una actuación excelsa, en la que prácticamente le bastó con su espectacular scratch del primer tramo. Entre los R-GT, no hubo color y Romain Dumas se llevó una clara victoria sobre un François Delecour que asegura que el Abarth 124 Rally ha evolucionado mucho desde el pasado mes de enero. ¿Quién salió satisfecho del Rallye de Córcega? Posiblemente, los aficionados.

Dame tu opinión sobre este artículo

Ni fu, ni fa
Me ha gustado
¡Muy bueno!

Iván Fernández

Seguir leyendo...

Cargando...