Mark Stielow, director de ingeniería del departamento deportivo de General Motors, desestimó la opción de que Corvette Racing realice una transición al programa GT3, por tal razón declaró que el apoyo oficial del fabricante finalizará este año, delegando toda la responsabilidad de gestionar las unidades Corvette Z06 GT3.R a la empresa particular Patt Miller, tal como se comunicó hace varias semanas atrás. De esta forma, desaparecerá de las pistas una de las estructuras más exitosas en las categorías de resistencia.
A lo largo de 25 años, Corvette Racing ha acumulado ocho victorias en su clase en las 24 Horas de Le Mans, cuatro en las 24 Horas de Daytona, diez títulos de la American Le Mans Series y cinco de la IMSA WeatherTech SportsCar Championship. La desaparición de la estructura oficial implica que parte del personal será reasignado al programa Cadillac y otro tanto asumirá las tareas asignadas desde Patt Miller Motorsport en lo que involucra a su representación en las clases GTD Pro y GTE-Am de la IMSA y del WEC respectivamente.
Para Stielow no tiene sentido mantener un equipo de fábrica cuando la plataforma GT3 se orienta hacia los clientes. En tal caso analizarán cuáles serán los socios ideales para conceder los coches y la asistencia, selección que espera realizar el venidero mes de noviembre una vez que los interesados prueben alguno de los dos coches que se han construido para tal fin. Si bien Corvette Racing y Pratt Miller han estado juntos desde hace muchos años, en el proceso que iniciará, General Motors dejará de invertir recursos en el programa, allí justamente radica la diferencia.
Explicó que el traslado al concepto GT3 es necesario debido a los cambios realizados en el deporte motor y siendo así resulta ilógico continuar operando un equipo de fábrica y a la vez aspirar que los clientes soliciten los coches. Bajo esa perspectiva es poco probable que funcione tal modelo de negocio. En GM llegaron a la conclusión que los clientes del Corvette no van a querer competir contra una estructura oficial y por lo tanto los interesados se inclinarían por otras alternativas más razonables. Con respecto a la participación en la case GTD Pro el año que viene, una vez que Pratt Miller se constituya como piedra angular de la operación GT3, tal empresa deberá ubicar a un socio que sea capaz de reemplazar a Corvette Racing en la gestión.
En palabras de Mark Stielow:
Nos estamos moviendo hacia la plataforma GT3, por lo que vamos a tener un verdadero programa para clientes. No vamos a tener un programa Corvette completamente financiado por la fábrica, pero tendremos a un grupo de pilotos [que competirán con los equipos de los clientes]. Vamos a apoyar a diferentes equipos hasta cierto punto, pero no será como Cadillac, que es un esfuerzo de fábrica totalmente financiado.
Vía Sportscar365