Hace tiempo que Gerhard Berger trabaja en tratar de enmendar la situación del Campeonato de Alemán de Turismos junto al resto de los responsables del ITR. La futura salida de Mercedes-AMG a finales de esta misma temporada deja a al DTM contra las cuerdas, con la única representación de BMW y Audi, los cuales no están dispuestos a realizar un esfuerzo más allá de los seis coches en parrilla al que redujeron todas las formaciones de cara a disputar la campaña 2018.
Los equipos hace meses que piden garantías a los responsables del campeonato acerca de la llegada de nuevos fabricantes que mantengan el interés, algo que por el momento parece haber dado un paso adelante con el acuerdo total con los organizadores del Super GT respecto al reglamento Class One. Ahora parece haberse abierto una nueva oportunidad de futuro después de que la prensa británica, con Autosport a la cabeza, haya apuntado a que un equipo estaría interesada en entrar al DTM en 2020 con un equipo de cuatro Aston Martin
En concreto esa implicación podría llegar a través de R-Motorsport, equipo suizo que controla el equipo con los Aston Martin en la Blancpain GT Endurance Cup y que a su vez está bajo el paraguas de Arden International y Jota Sport. Según las fuentes a las que hace referencia Autosport, un equipo podría surgir con el apoyo económico de Red Bull y con HWA construyendo los coches después de que pierdan gran carga de trabajo una vez que el proyecto de Mercedes en el DTM llegue a su fin.
No es la primera vez esta semana que se relaciona a la firma de las bebidas energéticas con su regreso al DTM, después de rumorearse en Zandvoort que Sébastien Ogier podría hacer su debut en el Campeonato Alemán con un Mercedes vestido por los colores de su patrocinador personal aprovechando que en el calendario todavía falta por correr en Spielberg, en casa de Red Bull Motorsports. Sería la primera vez que viesemos este hecho después de que tanto el Audi RS5 como el BMW M4 ya se hayan vestido con los toro rojos.
Hasta que se confirme, Autosport ha lanzado ya algunos nombres que podrían estar relacionados con el proyecto de hacer competir vehículos Aston Martin en el DTM, presumiblemente sin apoyo 100% oficial de la marca inglesa. Garry Horner, padre de Christian Horner y CEO de Arden sería el máximo responsable, mientras que para los pilotos se ha relacionado a Sébastien Buemi, Brendon Hartley, Nicki Thiim y Maxime Martin.
¿Y el motor? Aunque es cierto que Aston Martin ya ha roto moldes al utilizar en sus modelos de calle y de competición el V8 biturbo de Mercedes AMG, no parece que un reglamento técnico con motores de cuatro cilindros se adapte a la perfección a su experiencia e intereses. Es por ello que se plantea la opción de que estos coches pudieran incluso llevar el motor Honda que ya se utiliza en Super GT. Por el momento sólo son rumores, al igual que en el caso de Maseratti, pero cobran fuerza cuando los propios protagonistas aseguran que en palabras de Florian, jefe de equipo de R-Motorsport:
Somos una marca de automovilismo que está creciendo rápidamente y estamos mirando diferentes series mientras buscamos nuevas oportunidades. El DTM ciertamente sería de interés. Sin duda hay potencial, pero nada es concreto.
Vía | Autosport.com