Hoy será una jornada larga de trabajo. Los equipos han llegado al lugar habilitado para el vivac en Shubaytah con más energías de las esperadas después de haberse recortado significativamente la etapa de hoy por la imposibilidad de que los helicópteros pudieran estar disponibles en caso de accidente. Les tocará dormir en literas o en el suelo, a buen seguro con los peores lugares para aquellos que lleguen más tarde, cansados de una jornada difícil y después de reparar sus respectivas monturas. Bienvenidos a la Etapa Maratón del Dakar 2020.
Tocará trabajar con lo que cada uno posee en el coche y en el camión de asistencia rápida que se encuentra en competición. Más allá de eso, no contarán ni con la ayuda de los mecánicos, ni con la de los ingenieros. Es uno de los encantos de la etapa maratón, aunque también es cierto que la mayoría de las estructuras grandes suelen contratar a otros equipos con amplia experiencia para que les ayuden en estas labores, siendo Francesc Ester, del equipo Team Boucou, que ha sido en más de una vez bautizado como el ángel de la guarda de Fernando Alonso, el que se encargará de prestar su asistencia a dos de los gallos del Toyota GAZOO Racing:
En la etapa hemos parado bastante y para acabar el día, en el campamento, vamos a dar asistencia a los Toyota de Nasser Al-Attiyah, que necesitaban ruedas de recambio, y Fernando Alonso y Marc Coma, que nos han explicado su vuelco de esta mañana. Hoy ha sido una de esas etapas en las que no parábamos de ayudar. Al inicio tuvimos que tirar de algunos coches que estaban atascados en las dunas y poco después asistimos a Nani Roma y Dani Oliveras, que habían tenido problemas mecánicos – Francesc Ester
En el coche se lleva todo lo imprescindible:
A cada etapa los coches suelen salir con un buen cargamento de repuestos, al menos las piezas más imprescindibles y las herramientas para hacer las reparaciones más básicas para poder continuar en carrera. Los equipos de cabeza suelen elegir una semana para instruir a pilotos y mecánicos sobre cómo afrontar estas acciones, siendo en la mayoría de los casos los navegantes grandes mecánicos, además unos trabajadores incansables con el roadbook y en el asiento de la derecha.
En etapas muy difíciles y con mucha piedra, los 4×4 suelen portar hasta tres ruedas de repuesto, en el caso de la Toyota Hilux V8, dos en el lado de la izquierda, una en vertical y otra tumbada debajo del asiento del piloto, y otra a la derecha, también tumbada debajo del asiento del piloto, dejando un hueco en vertical justo al lado al que se accede a través de un acceso/capó lateral gemelo al del otro lado, donde se sitúan elementos como las palas, distintos botes con líquidos, un semieje y una batería.
En el espacio superior al eje trasero, justo donde el modelo de serie tiene la caja portaobjetos, en el modelo de competición se ha eliminado todo el peso prescindible, dejando el eje al descubierto y las suspensiones, además de llevar las planchas para la arena que se emplean en caso de quedarse atascado. De fondo, podemos ver el enorme depósito de combustible, con 520 litros de capacidad, y que se sitúa justo a espaldas de los competidores.
Curiosamente en el caso de las Toyota Hilux, en la parte inferior también se puede ver en la parte inferior una plancha de madera que cubre todos los elementos mecánicos que están situados más atrás del cubrecárter, con unos agujeros por los que se despliegan las barras del gato hidráulico que permite subir el coche para arreglar la suspensión o cambiar un neumático. Precisamente Jesús Calleja ha sido protagonista esta semana al haberse cargado dos de estos elementos durante las etapas del lunes y del martes, para el disgusto total de los mecánicos/ingenieros portugueses que le asisten a través de Overdrive.
En el caso de la pick-up, una de las curiosidades es lo retrasado que va dispuesto el motor, el cual invade el habitáculo para así contar con una posición mucho más centrada para favorecer el reparto de pesos y además muy cerca del suelo, lo que sitúa el centro de gravedad mucho más bajo.
Reparaciones de última hora después de un día accidentado:
Tocará trabajar en muchos de los casos de forma intensiva en los vehículos después de que la décima etapa haya tenido muchos accidentes en la primera parte del recorrido. A uno de los que les tocará trabajar es precisamente a Nani Roma. Junto a su copiloto, Dani Oliveras, el gigante de Folgueroles se ha tenido que afanar durante la jornada de hoy para sustituir el cambio que les había dejado tirados en su Borgward en torno al kilómetro 98.
Tras llegar la asistencia, afortunadamente pudieron reemprender la marcha, aunque ya dejándose más de cuatro horas y cruzando los dedos para que los problemas con la caja que ya afectaron a su compañero de equipo, Ricardo Porem, durante la primera semana, no se vuelvan a reproducir en estas dos etapas restantes, la de mañana que constará de 379 km contra el crono y 365 km de enlace hasta Haradh, repleta de dunas.
En otros casos como el de Carlos Sainz y Lucas Cruz, nada más llegar al vivac le han echado un vistazo a los desperfectos sufridos en el morro del MINI JCW Buggy después de un fuerte aterrizaje en una de las dunas de este miércoles. Tendrán que valorar si la plancha arrancada precisa de un cambio completo (si se posee) o si se puede enderezar y realizar una solución de emergencia para afrontar la penúltima jornada de este Dakar 2020. En el caso de Fernando Alonso, también contarán con un parabrisas nuevo, en este caso obtenido de uno de los camiones de asistencia, por lo que mañana no se espera que se le vuelva a ver con las gafas de motocross.
Si los 4×4 suelen portar tres neumáticos, en el caso de los buggies se suele optar por dos. En el caso del MINI JCW Buggy se opta por llevarlos los dos justo delante del eje posterior, para que así ese peso pueda ayudar a traccionar. La disposición es prácticamente abrazando el motor, en diagonal y mirando hacia el interior para así facilitar el acceso cuando se realiza un cambio de rueda. Aun así, es más complejo que en un 4×4, por lo que el tiempo de cambio suele estar en torno a los tres minutos por el minuto y medio de sus rivales.
Además, las dimensiones de los neumáticos suelen llevar a que los equipos decidan únicamente llevar dos repuestos para no llevar muchos kilos extras. Obviamente se apoyan en este caso en el sistema de inflado y desinflado, el cual les permite llevar una presión en las gomas adecuada para cada terreno, reduciendo la tendencia a los pinchazos que tanto ha condicionado la primera semana a las Toyota. Obviamente hay excepciones, como es el caso de SsangYong Motorsport, que hoy ha decidido llevar tres repuestos en su 4×2 para así cubrirse las espaldas en caso de un gran desgaste o un excesivo número de pinchazos.
En una etapa maratón, no puedes recibir asistencia entre una jornada y la siguiente, y sólo cuentas con los medios que lleves a bordo o en un camión en carrera. Nosotros hemos optado llevar una tercera rueda de recambio, cuando normalmente sólo llevamos dos; además, en un camión llevamos una cuarta. Aunque hasta ahora nuestros neumáticos Yokohama se han comportado de fábula y no hemos pinchado, hemos preferido ir sobre seguro – Óscar Fuertes
Líderes de la general, quizás lo que mañana muchos envidien del coche de Carlos Sainz y Lucas Crus no sea su competitividad o versatilidad, sino la cafetera de capsulas que portan en el habitáculo para los largos enlaces… más si tenemos en cuenta que hoy pocos van a dormir en ese barracón de ronquidos.
Fotos | Red Bull Content Pool, BF Goodrich, X-Raid, Toyota GAZOO Racing
