El jefe de la escudería Renault manifestó que el constructor francés calculó mal su ingreso a la era híbrida en 2014, en el sentido de que improvisó al pasar de los motores V8 a las unidades de potencia, razón por la cual parece que está rezagado en cuanto a desarrollo. Argumentó que cuando él era jefe de Caterham les advirtió a los responsables del propulsor que estaban un paso atrás en el concepto de motor, pero como ganaban carreras junto a Red Bull, su opinión no fue tomada muy en cuenta.
Justamente fue ese período de victorias y títulos con el motor V8 lo que produjo un letargo en el programa híbrido y cuando inició no fue en la dirección correcta. Posteriormente se produjeron las críticas públicas de Red Bull hacia Renault, debido a la frustración de no poder ganar, y el resto es historia reciente, la ruptura entre ambas estructura y la posterior asociación del equipo austriaco con Honda.
Para Abiteboul, Renault no planificó a consciencia su entrada a la Fórmula 1 híbrida, no realizó una inversión acorde a la tecnología involucrada, incluyendo la ausencia de personal adecuado para diseñar y desarrollar unidades de potencia. Los mejores ingenieros permanecieron mucho tiempo en el programa V8 y cuando fueron reasignados al híbrido ya era un poco tarde.
Ahora Renault se encuentra en una posición muy incómoda, es el propulsor más deficiente de la Fórmula 1 y la escudería oficial no termina de convencer. En este punto en particular, Abiteboul centra sus críticas en la unidad de potencia como principal responsable del bajo rendimiento, pero considera que las críticas negativas no pueden orientarse a Renault como constructor comercial, algo que reprochó con anterioridad a Red Bull Racing.
En palabras de Cyril Abiteboul:
A principios de 2014, los errores se fueron encadenados. Yo mismo era cliente de Renault y puedo decir que realmente estaban atrasados en la comprensión del concepto y el desarrollo de este tipo de motores. Estaban tan obsesionados con el V8 que nos olvidamos del futuro, fue un gran error. Comprendí la frustración de Red Bull hasta cierto punto, estaban acostumbrados al éxito y todo se detuvo.
Vía | Nextgen Auto