La revolución tecnológica del Rally Dakar no se limitará únicamente a introducir el Roadbook digital. El Rally-Raid organizado por ASO ya avanzó durante la edición del pasado mes de enero su intención de incluir nuevos sistemas de propulsión, sin embargo, la solución es mucho más rápida y concisa de lo que se esperaba, cambiando completamente la realidad de la competición en coches y en camiones cuando se llegue a la edición de la carrera en 2030.
Ha sido precisamente cuando se ha hablado de la etapa con inicio y final de Neom, emplazamiento en el que se quiere crear la “ciudad del futuro”, cuando David Castera no sólo ha introducido el que será el primer vivac en la historia del Dakar que utilizará energía verde, por lo que se olvidará de los generadores diésel tan habituales en las asistencias y en circuitos. Sin embargo, el director del Dakar ha enunciado el que será su plan para la próxima década en la carrera.
Es entonces cuando Castera ha pasado a relatar el plan que tiene ASO, con todos los coches y camiones de los considerados Élite o, mejor dicho, los prioritarios que suelen luchar por las primeras plazas, teniendo que adoptar trenes motrices alimentados por hidrógeno, mientras que para 2030 se espera que este tipo de tecnología abarque ya todos los competidores en ambas categorías. Recordemos que además de la aparición del ODYSSEY 21 en el pasado Dakar 2020, el equipo MKR puso en liza el primer camión híbrido que compite en el rally-raid, mientras que el el Acciona 100% EcoPowered se convirtió en 2017 en el primer coche cero emisiones en completar la carrera.
El plan, que se anunciará más detalladamente en Neom la noche del 11 de enero es una ruptura radical con la hoja de ruta que aparentemente había seguido la industria automotriz, copiando una idea similar a la que ACO está poniendo en marcha con el Mundial de Resistencia y su Mission24. Prácticamente la decisión de ASO es la de saltarse la era eléctrica enchufable, para adoptar la que se espera que sea la respuesta de movilidad más equilibrada para el futuro. En cuanto a los planes del resto de campeonatos, NASCAR, Supercars, WRC e IMSA avanzan hacia los híbridos, el Mundial de RallyCross y el DTM hacia los eléctricos 100% puros y la Fórmula 1 se espera que mantenga los trenes motrices híbridos apoyados en combustibles sintéticos.
El Dakar siempre ha sido un laboratorio abierto y hemos decidido en ASO avanzar hacia una motorización alternativa. ¿Qué significa eso? Significa que ahora el Dakar se enfocará hacia un lento pero seguro camino hacia el hidrógeno. Nuestra idea es la de llegar al 2030 con un uso total de hidrógeno en coches y camiones. Para eso habrá una transición con una primera fase en 2026, cuando se verán afectados todos los coches y camiones de élite. Luego serán todos los vehículos en 2030 – David Castera