En vísperas del Gran Premio de Azerbaiyán, Daniel Ricciardo es consciente de la avalancha de rumores que se han desatado sobre su futuro inmediato, tomando en cuenta su bajo rendimiento y el contrato que posee. El piloto australiano desembarcó en McLaren el año pasado precedido por la fama de ser un ganador, lo que demostró al imponerse en Italia, sin embargo, su rendimiento general ha sido irregular y esta temporada atraviesa por un preocupante período de sequía que ha llevado a Zak Brown, CEO de McLaren, a replantearse la opción de hacer valer el año adicional de su contrato o concederle la libertad al finalizar este campeonato.
Para Ricciardo este ciclo ha sido una especie de montaña rusa emocional, no puede ocultar su decepción al no poder conseguir buenos resultados, o al menos comparables a los que obtiene su compañero Lando Norris. La situación para el australiano es delicada puesto que su contrato con McLaren es el de un piloto top y ahora mismo apenas ha sumado once puntos de los 59 que acumula la escudería, es decir que sobre el papel ha representado una mala inversión puesto que se suponía que iba a imponer su jerarquía para establecerse como piloto número uno del equipo británico.
Al respecto, Ricciardo declaró que si bien su estado de ánimo no está bien, siente que no ha perdido sus capacidades al volante. Puede pasar de la depresión al entusiasmo en instantes y anhela demostrar a sus detractores que están equivocados, que simplemente atraviesa por un período negativo que pretende revertir lo más pronto posible, tal como lo ha hecho en años anteriores. Admite que lee la prensa y está enterado de lo que se ha dicho sobre él en las últimas semanas, lo que le ha llevado a pensar en cómo mejorar para salir del foso dónde está.
Acerca su hipotético futuro fuera de McLaren, Ricciardo evitó hablar de ello, aunque Zak Brown declaró públicamente que existe una cláusula en el contrato del piloto que le permite desprenderse de él a los dos años ya que el tercero es opcional. Según el CEO de McLaren, el australiano no ha cumplido con las expectativas que se fijaron ambas partes antes de establecer un vínculo laboral.
En palabras de Daniel Ricciardo:
La realidad es que no he olvidado cómo pilotar, no he perdido mi competitivad, es solo un momento negativo en el tiempo del que sé que puedo salir. Nadie se meterá en mí más que yo. Se trata de que demuestre que tengo razón. Incluso como en Monza, ahora la gente dice que aquello fue casual, pero no ganas de gratis en la Fórmula 1, eso no sucede. Tienes que ser un piloto muy seguro para ejecutar un fin de semana perfecto. Creo que en pocas palabras, sé que todavía puedo hacerlo y creo al cien por ciento en mí mismo.
Vía | PlanetF1