El próximo 3 de agosto se cumplirá un año desde que Daniel Ricciardo confirmara su decisión de abandonar Red Bull Racing y posteriormente confirmar que su nuevo destino era la escudería Renault junto a Nico Hülkenberg. El australiano terminaba la temporada 2018 con un rosario de abandonos y sinsabores, comenzando la presenta campaña con un papel secundario en el que no ha estado en disposición de plantar cara a ninguna de las tres formaciones de cabeza.
A pesar de ello, Daniel Ricciardo no se arrepiente de haber fichado por Renault. Ganador de siete Grandes Premios durante su carrera deportiva, el oceánico obviamente iba a ser cuestionado después de que Max Verstappen consiguiera el triunfo en el pasado GP de Austria. Con la firma del rombo sufriendo para estar de forma constante en los puntos, Daniel dice que solo se arrepentiría de este movimiento si Red Bull estuviera peleando por el título.
Décimo en el campeonato de pilotos, Ricciardo ha conseguido meterse en los puntos tres veces esta temporada 2019, con un sexto puesto como mejor resultado en Canadá, estando empatado a 16 puntos con su compañero de equipo. Por delante, mucho trabajo para una Renault que tuvo un fin de semana para olvidar en el Red Bull Ring y que se encuentra indirectamente envuelto en la Silly Season después de que en Mónaco surgiera el rumor de que Nico Hülkenberg podría haber establecido los primeros contactos con la firma de las bebidas energéticas para sustituir a Pierre Gasly.
No. Honestamente, no me arrepiento. Para este momento el año pasado, Red Bull tenía tres victorias. Esa fue la primera. Obviamente estoy más atrás en este momento, por supuesto, pero esperaba esto y si me quedaba en Red Bull era para ganar un título. Claro, obtuvieron la victoria el fin de semana pasado, pero aún están lejos del título. Eso no es hurgar en la herida, eso es sólo la realidad. Así que no creo que necesariamente hubiera logrado nada más de lo que ya estaba logrando allí, así que, por eso, no me arrepiento. En Renault sigue habiendo mucho trabajo por hacer, pero cuando logras un buen resultado todo compensa, como pasó en Montreal.