Puede que la rumorología en torno a su posible marcha de la Fórmula E domine gran parte del debate, pero lo que nadie le podrá arrebatar ya a Mercedes son los laureles: Nyck de Vries y la marca de la estrella lograron este domingo proclamarse campeones del mundo de Fórmula E tras la disputa de una última carrera tan loca como cualquiera podría esperar del certamen eléctrico.
Pese a llegar líder del campeonato, Nyck de Vries no las podía tener todas consigo ni mucho menos tras la sesión de clasificación y con 13 aspirantes al título: el neerlandés no accedió a Superpole y fue tan sólo 13º en parrilla. De hecho el gran favorito pasaba a ser Mitch Evans, tercero tras Stoffel Vandoorne y Oliver Rowland. Pero todo cambió en cuanto se apagaron los semáforos.
Las opciones de Jaguar y Venturi saltaron por los aires nada más arrancar la prueba: Evans se quedó clavado en parrilla y Edoardo Mortara no pudo esquivar su monoplaza, esfumándose así las opciones de dos grandes candidatos. Y tras una larga bandera roja el camino quedó aún más allanado para Nyck de Vries al perder Jake Dennis su BMW en frenada por un fallo mecánico y besar el muro.
We're under a red flag in Berlin after a collision on the start line between two of our championship contenders – @mitchevans_ and @edomortara.
Great to see both drivers get out of the car ok. They will be going to the medical centre for checks!
🇩🇪 2021 @BMWi #BerlinEPrix pic.twitter.com/Ndg2aEJwOu
— Formula E (@FIAFormulaE) August 15, 2021
Teniendo en cuenta que su compañero Stoffel Vandoorne mantuvo la cabeza de carrera en estos compases iniciales y que De Vries fue gestionando su posición en la parte baja de la zona de puntos, sin rivales cercanos, todo parecía encaminado hacia una exhibición de Mercedes. Pero Vandoorne no pudo mantener el ritmo como líder y tras verse superado por Nato, Sims y Rowland pasó a ejercer de peón y escolta de De Vries, ya cuarto.
No obstante aún quedaba una nueva aparición del Safety Car al encerrar contra el muro Lucas di Grassi a António Felix da Costa, que se quedó tirado en pista. Y en la resalida De Vries quiso aprovechar el Fanboost para optar el podio, algo que le pudo costar muy caro… Afortunadamente evitó incidentes mayores y se conformó con caer al octavo puesto, suficiente para alzarse con el título.
El triunfo fue para Norman Nato, quien tras muchas veces llamando a la puerta y claudicando por falta de energía, al fin pudo subir a lo más alto del podio en la última carrera de la temporada, acompañado en el podio por Oliver Rowland y Stoffel Vandoorne, que aprovechó la combinación de Fanboost y un segundo Attack Mode sin usar tras el Safety Car.
Nyck de Vries y Mercedes logran así sus primeros títulos en Fórmula E (y quién sabe si últimos), llevándose el subcampeonato Edoardo Mortara pese a abandonar, muestra clara de la locura de carrera en Berlín.
Foto | Daimler