En lo que va de temporada, ha sido frecuente observar a los pilotos del equipo Haas F1 clasificarse muy bien, pero en carrera se van desvaneciendo. En China, ni Kevin Magnussen ni Romain Grosjean no pudieron mantener el ritmo a pesar de tomar la salida desde el noveno y el décimo lugar respectivamente, llegando a la meta una vuelta por detrás y fuera de la zona de puntos. Para Günther Steiner, el mayor problemas es que el VF-19 no logra calentar los neumáticos con rapidez y además destruye los compuestos de forma prematura. Se entiende que la solución puede estar en rediseñar el coche, pero resulta que el próximo gran premio es el 28 de abril, así que no hay tiempo para reaccionar.
Explicó Steiner que están decepcionados porque han observado que el inicio prometedor de Kevin Magnussen en Melbourne ha resultado solamente una ilusión. En Bahréin se encendieron las alarmas cuando se advirtió que no tenían ritmo para luchar en la mitad de la parrilla, situación que se repitió en China. Lo preocupante para el departamento técnico de la escudería es que en pretemporada no encontraron mayores inconvenientes con el actual monoplaza y ahora resulta que requiere de importantes modificaciones, al menos para funcionar de forma óptima con los neumáticos.
Según su percepción, pudieron destacar en Australia por las características del circuito y la temperatura del ambiente, pero todo cambió cuando confrontaron el calor de Bahréin y su circuito de largas rectas, allí no pudieron establecer una ventana de funcionamiento eficiente, lo mismo sucedió en China y es muy probable que se repita en Azerbaiyán. Para Steiner, la solución pasa por esperar una propuesta técnica del equipo cuando se pueda aplicar debido a que el calendario no les permite actuar con celeridad.
En palabras de Günther Steiner:
No es lo que esperamos. Debemos analizar el problema y trabajar arduamente para solucionarlo. Al salir de Bahréin lo intentamos, pero no lo arreglamos, no pudimos solucionarlo a tiempo. Es un gran problema y no lo vimos durante las pruebas de invierno. Bakú es aún peor, me estoy preparando para la decepción. Espero que encontremos algo antes de Bakú, en estas pistas no podemos correr lo suficiente porque no hay afinidad con los neumáticos. Las pistas con rectas largas y curvas lentas nos están afectando porque impiden calentar los neumáticos en el tiempo ideal, así que ni siquiera los podemos mantener en temperatura las vueltas que estipulamos.
Vía | Crash