Dos pinchazos de Nikolay Gryazin dejan líder a Alexey Lukyanuk. Buen papel en Polonia de los españoles

Alexey Lukyanuk comenzó otro año igual. El piloto ruso salía a defender su título continental cosechado la pasada temporada siendo el más rápido en el tramo de clasificación previo al inicio del Rally de Polonia. Nada parecía haber cambiado. Neumáticos Pirelli, el Citroën C3 Rally2 de Saintéloc y un tiempo que resultó ser inalcanzable incluso para Andreas Mikkelsen. Iba a ser muy importante elegir la posición de salida a pesar de que no todos los tramos estaban completamente secos y algunas especiales mostraban zonas muy húmedas o con mucha agua estancada.

Sería un tramo de 3,26 kilómetros con mucha acción y muy prometedor, con Nil Solans marcando el tercer mejor registro detrás del piloto noruego, actualmente líder del WRC2. Sería Nikolay Gryazin el que más apuros pasaba, ya que, el terreno blando de la primera curva en tierra llevaba a que el ruso bloqueara el radiador de su Volkswagen Polo GTI R5 con la tierra y no pudiera realizar un tiempo competitivo. Esto le llevó a salir a los tramos este sábado muy retrasado en el orden de salida, más allá de la trigésima posición, lo que llevaba a que se tuviera que esperar al paso de prácticamente todos los R5/Rally2, e incluso los competidores de ERC1 Junior para saber sus cronos.

Y lo cierto es que iba a ser necesario esperar a ver los tiempos de Nikolay durante gran parte de la jornada ya que sería sin lugar a dudas uno de los grandes protagonistas. Su scratch en el tramo espectáculo de la noche del viernes ya lo situaría líder, dominando los 2,50 kilómetros de la corta especial de Mikołajki Arena, creado en los terrenos del Hotel Gołębiewski. Tras él, Craig Breen y el local Wojciech Chuchała.

Ya en la etapa del sábado, Gryazin no iba a hacer prisioneros. El bucle matinal del piloto de Movisport iba a encadenar un scratch tras otro hasta extender su liderato hasta los 35,9 segundos sobre su compatriota, el bicampeón de Europa, Alexey Lukyanuk, mientras que Andreas Mikkelsen se quedaba con el tercer escalón del podio provisional. Lukyanuk que salir a la prueba con un C3 Rally2 de recambio después de que tuviera un accidente con su unidad titular durante las pruebas realizadas el pasado martes.

No sería sin sustos tampoco para su compatriota ya que el Volkswagen de Gryazin llegaba al final del TC3 con el frontal bastante afectado tras haber golpeado un fardo de heno. Con las condiciones de seco reinantes, salir muy atrás en el orden de pista en una prueba con tantos R5 no era algo que jugara especialmente en contra suyo.

Para los españoles sería una jornada de menos a más, con Nil Solans llegando al TC2 con pequeños desperfectos en su Skoda, además de haber tenido que lidiar con problemas en la válvula pop-off y de reglajes, mientras que en el caso de Efrén Llarena, pequeños errores iniciales le hacían perder algo más de tiempo que el deseado. Recordemos que los dos llevan todo el año sin competir, y que algunos pilotos como Mikkelsen o Gryazin se han comprometido con programas dobles, tanto en el WRC como en el europeo. Todo ello aderezado con una lista de 38 R5/Rally2 y el hecho de que el burgalés no había competido nunca antes sobre este terreno.

No bajaría el pistón Gryazin por la tarde, sumando el primer scratch del segundo bucle (el quinto de seis posibles) y logrando el segundo mejor tiempo en el TC6 a una décima de Lukyanuk. Todo parecía muy a favor del joven piloto ruso frente a su compatriota, afrontando las dos últimas especiales del día con más de 40 segundos de margen y con la noticia de que uno de los teóricos hombres fuertes, Craig Breen, debía tomar el camino del abandono tras romper la suspensión en su Hyundai i20 R5. El irlandés ya había perdido más de un minuto nada más comenzar la etapa por un pinchazo y a pesar de luchar por estar entre los cinco primeros, tenía que retirarse antes de completar la etapa.

Mucho más dramático sería el caso de Gryazin, el cual llegaba a la meta del TC7 (tramo que vería la bandera roja por el accidente de uno de los competidores polacos) con dos ruedas pinchadas y no disponía de repuestos para terminar el día. Aunque llegaría a completar el tramo y retener la segunda plaza, a 10,6 segundos de Lukyanuk, la prueba se había acabado una vez más para Gryazin. Vuelco en la general, con el vigente campeón tomando el mando por delante de Mikkelsen y de Mikolaj Marczyk.

Quizás las mejores noticias llegaban para los españoles, que conseguía recuperar posiciones rápidamente, situándose Nil Solans quinto y Efrén Llarena octavo, estando el burgalés incluso rozando el scratch en la segunda pasada por la superespecial, en la que se quedaba a ocho décimas de Wojciech Chuchała, el polaco que está secundando a Marczyk desde la cuarta plaza. A la espera de los resultados en ERC3 (Pep Bassas estaba cuarto tras el TC6), la mejor noticia llega en ERC2 con el liderato de Javier Pardo al volante del Suzuki Swift R4LLY S oficial de Suzuki Ibérica, con el alaricano aprovechándose de un accidente de Tibor Erdi Jr, tricampeón de la categoría y principal amenaza de los de Juan López Frade.

Hay que lamentar sin embargo el abandono de Alejandro Cachón, ganador el año pasado de la Beca de la RFEdA y que se encontraba realizando un gran debut junto a copiloto asturiano, Jandrín. El cántabro, que había estado segundo tras el TC1, había caído hasta la tercera posición en el TC2, justo antes de retirarse por accidente.

Clasificación tras TC8 – Rally de Polonia 2021