Dejad que el rallycross se acerque a mí. Uno de los principales problemas que me he encontrado durante estos años escribiendo acerca del Mundial de RallyCross es algo similar a lo que también me ocurre con el más reconocible WRC: para entender el deporte es necesario un aprendizaje previo de algunos de sus secretos más básicos. En el caso del World RX, podemos decir que siguen siendo carreras, que gana el que acaba primero pero, aun así, cuenta con muchos entresijos más allá de este principio básico de las competiciones de circuitos.
Por ello es importante que se acerque el deporte a las ciudades, algo que viene sucediendo en el caso del Mundial de RallyCross con su visita urbana a la localidad cercana al Circuito de Trois-Rivieres. Después de anunciar la subasta de cuatro de las cinco unidades del Audi S1 EKS RX Supercar, el equipo de Mattias Ekström decidía darles una despedida a la altura con un vídeo promocional por las calles de Riga, que este año ha vuelto a acoger el campeonato intercontinental de la especialidad.
Competición entre Nico Müller, Topi Heikkinen, Reinis Nitiss y el propio Ekström por saber quién llegará antes a cruzar la meta de la pista letona… Pero el jefe siempre tiene un as bajo la manga, tal y como demostró hace dos fines de semana cuando consiguió su cuarta victoria de la temporada.