La vuelta del Ford Mustang al ruedo de los Supercars promete ser por todo lo alto. En Estados Unidos lo tienen claro, el ‘pony’ será muy importante en el futuro de la marca a medio plazo, algo que queda demostrado en los planes que tiene la firma de limitar la gama que ofrecerá en el país de las barras y las estrellas a únicamente el muscle car, SUV’s y crossover. No sería de extrañar que esta arriesgada medida de eliminar vehículos como el Fusion, el Taurus o los Focus o Fiesta también se pudiera llevar a cabo con modelos como el Falcon en Australia, país con algunas similitudes en cuanto a gustos por los automóviles comparados con los norteamericanos.
De esta forma podríamos decir que el cúmulo de anuncios hace algunos días, coincidiendo con la fiesta del 50 aniversario del nacimiento del Ford Mustang, con el relevo del Ford Falcon y del Ford Fusion en los Supercars y en la NASCAR no serían en ninguno de los casos una mera casualidad. Por el momento tendremos que esperar a ver qué decisión toma Ford Australia, la cual aprovechaba el otro día para presentar su gama junto a un Mustang decorado con los colores oficiales que servía como aperitivo de lo que está por llegar.
Mientras esperamos la versión definitiva del Ford Mustang Supercar de 2019, los responsables del popular campeonato de turismos le han pedido al diseñador Scott Yorston una serie de renders que mostraran cómo puede ser el aspecto ya con el kit aerodinámico integrado y con las salidas de escape laterales que tradicionalmente han caracterizado los modelos de esta serie. Ahora, con la posible deriva que está a punto de tomar la estrategia comercial de Ford en Estados Unidos, es imposible no acordarse de que precisamente el Mustang estuvo a punto de convertirse en el GTE de la marca del ovalo en lugar del Ford GT. ¡De locos!