Obviamente hay que salvar las diferencias, pero lo vivido este fin de semana después de la victoria de Lewis Hamilton en el Gran Premio de Emilia-Romagna recordó a aquel momento en el que el Real Madrid había ganado una nueva final de Champions League, y en plena efervescencia de la celebración, Cristiano Ronaldo deslizaba que su marcha estaba próxima. Lo protagonizado por el británico este fin de semana, en plenos festejos del séptimo título de Mercedes-AMG F1, parecía no ser lo más adecuado tanto en forma, lugar y modo.
Debemos recordar que Lewis Hamilton sigue negociando su contrato para la próxima temporada, el cual podría además ser extensivo hasta más allá de 2023, especialmente si se confirma el techo que se quiere situar para los salarios de los pilotos. Enfilado ya su heptacampeonato y a falta de la sentencia (con 85 puntos de ventaja sobre Valtteri y 104 por repartirse parece inevitable), el británico es consciente de que actualmente la escudería de la estrella no tiene un plan B para suplir su posible marcha, por lo que cuenta con ese AS debajo de la manga que es tan importante en una negociación con varios millones de diferencia entre las exigencias y la oferta.
¿Está Hamilton más cerca de imitar a Nico Rosberg? Parece difícil cuando él mismo ha defendido durante los últimos meses que sigue disfrutando mucho de competir y que está cada vez más cerca de coronarse como el piloto con más entorchados de la historia de la Fórmula 1, motivación que él mismo ha reconocido que no le movía, pero que obviamente parece incomprensible no luchar por ello después de un camino tan largo. Obviamente sus declaraciones no quieren decir firmemente que Lewis vaya a faltar con su cita con la parrilla de 2021, pero al menos no cierra completamente la puerta como venía haciendo previamente. A buen seguro el actual estado de la humanidad condicionará muchas decisiones deportivas, entre ellas las de Sébastien Ogier en el WRC o las de otros pilotos veteranos.
Bueno, estamos en noviembre y es una locura que la Navidad no esté tan lejos. Naturalmente, me siento muy bien y me siento muy fuerte. Siento que podría seguir durante muchos meses, pero mencionaste Toto y la vida útil, por lo que hay varias cosas que permanecen en mi mente. Me gustaría estar aquí el año que viene, pero no hay garantía de eso, seguro. Hay muchas cosas que me emocionan más allá de la F1, así que el tiempo lo dirá – Lewis Hamilton
Con Daimler asegurando que la escudería seguirá presente en la Fórmula 1 los próximos años, siendo AMG la que tomará más peso en la imagen del proyecto, la cuestión que plantea esta duda de Hamilton es si hay alguien en el mercado que pueda suplirle. Obviamente tanto Fernando Alonso como Sebastian Vettel parecen fuera de la ecuación debido a su edad y el momento en sus respectivas carreras deportivas.
En el mercado hay un nombre claro como es el de Max Verstappen, en un momento en el que Red Bull Racing no ha terminado de cerrar el futuro de la escudería tras anunciarse la marcha de Honda. Pensar en la congelación de motores, con la unidad de potencia japonesa un paso por detrás no augura un futuro competitivo para el holandés de permanecer con los de Milton Keynes. Esteban Ocon se desvinculó de Mercedes para fichar por Renault, mientras que George Russell sabe que deberá seguir un año más con Williams y que su progresión estará limitada de nuevo por el rendimiento del monoplaza. Su error en Imola es una demostración de que todavía tiene factor de mejora.
Sin Campeón del Mundo y sin capitán de la nave:
Ese es quizás el peor de los escenarios en el que se pueda encontrar Mercedes de cara a 2021. No perder únicamente a Lewis Hamilton, sino también despedirse de un Toto Wolff que lleva ya meses dejando entrever que a final de esta temporada puede despedirse de su cargo y pasar más tiempo con su familia. El austriaco ya ha admitido que se encuentra buscando un sucesor que pueda tomar su relevo en el cargo, para poder seguir ligado al equipo, pero sin tener que viajar a cada uno de los circuitos y seguramente tampoco ejercer ese papel de jefe de equipo, sino una figura más alejada de los focos.
Wolff reconoce que por el momento no ha llegado a ese momento, ni en lo personal, porque se sigue divirtiendo en las carreras, ni en lo que implica encontrar a la persona adecuada que pueda tomar ese papel de liderazgo dentro de la escudería que ha dominado absolutamente la Fórmula 1 desde la entrada de la era híbrida, en la temporada 2014.
La responsabilidad es alta, no sólo porque este domingo hayan igualado a Lotus como cuarto equipo con más títulos de la historia del campeonato, únicamente superados por McLaren, Williams y Ferrari. También lo será porque está en juego esa imagen de rodillo germano, de equipo infalible y resolutivo que les ha acompañado durante los últimos siete años.
No siento que defraudaré al equipo. Soy accionista y me quedaré con el equipo, eso es lo que hemos acordado con Daimler, pero tal vez luego en otra función. Ya sea CEO o presidente, aún no lo hemos descubierto. Daimler me ha dado muchas opciones. Pero, antes de hacer la transición a un nuevo rol, necesito asegurarme de que alguien más esté participando en las 23 carreras y yo pueda disfrutar frente a una pantalla Zoom – Toto Wolff