No es fin de semana de carreras en el WEC, sin embargo, el ACO aprovechó la disputa de las 4 Horas de Spa-Francorchamps, valedera para las ELMS, para presentar definitivamente su apuesta por el hidrógeno. Bautizado como Mission H24, no deja de ser el proyecto que se anunció hace unas semanas, la intención de hacer que los vehículos con este tipo de propulsión lleguen a ser protagonistas en las 24 Horas de Le Mans de la temporada 2024.
Apenas fue un directo de una veintena de minutos a través del recién creado perfil de Facebook de este proyecto, lo suficiente para poder ver el estado actual del GreenGT LMPH2G y su planta rodando sobre el asfalto del trazado belga con Yannick Dalmas rodando a su volante. Obviamente se trataba de una exhibición de cara a la galería que buscando mostrar el rendimiento de dicho prototipo desarrollado sobre la base de un LMP3 y que cuenta con entre 250-480 KW de potencia (algo más de 660 CV) que se consiguen a través de un sistema por el cual se introduce hidrógeno en una pila de combustible a la que posteriormente se le inyecta oxigeno (se comprime y acelera el aire a través de un compresor situado tras la toma de aire superior). La reacción para la formación de moléculas de agua, única emisión que produce dicho sistema, genera calor y electricidad con la que se alimenta una batería.
En el caso del GreentGT se cuenta con un sistema de recuperación de energía cinética que precisamente apoya a la pila de combustible, la cual alimentada por hasta 8,6 kilogramos de hidrógeno es capaz de abastecer de electricidad a la batería y esta a los cuatro motores, dos en cada rueda del eje trasero. Con una caja de cambios de una velocidad, sin embrague, ni diferencial, lo que parecía que iba a ser un proyecto que se quedara en el dique seco ha sido recuperado como misión de futuro del ACO y la FIA, apuntando a una tecnología de propulsión que a pesar de su poco poder de penetración de mercado por el momento en nuestro país, parece que puede estar destinada a ser la siguiente apuesta de los fabricantes después de una primera fase de electrificación global en los próximos cinco años.
Ya en la jornada del domingo, el GreenGT realizo las labores de coche de seguridad en el lanzamiento de la carrera, llegando incluso a alcanzar los 300 km/h y para celebrarlo, personalidades y periodistas allí presentes recibían incluso una botella de agua obtenida directamente del escape del LMPH2G.
Es un privilegio formar parte de un evento así, tomar el volante de un coche impulsado por hidrógeno. Puedo asegurarle que no estaba nada preocupado por conducir un vehículo con hidrógeno a bordo. Todo está perfectamente bajo control con numerosas medidas de seguridad. El silencio del prototipo al salir del pit lane es notable. Se siente distinto de conducir y necesité que me explicaran varios procedimientos. Para una máquina que aún no ha entrado en la etapa de desarrollo, todo el paquete es realmente prometedor. ¡Más que nada cuando sabes que la única emisión de este automóvil es el vapor de agua!
