La dolorosa derrota en el último tramo del Rally de Italia-Cerdeña a manos de Thierry Neuville y por sólo siete décimas podía ser aún peor para Sébastien Ogier. El vigente campeón del mundo se olvidó de su carné de ruta en la penúltima especial de la prueba insular, lo cual amenazaba con una importante sanción con posibles consecuencias deportivas. Pero finalmente todo quedará en un susto para el francés.
Los comisarios de la prueba han decidido imponer al piloto de M-Sport una multa económica de 10.000 euros, así como dejar en suspenso y a expensas de una repetición del incidente en el futuro cualquier tipo de sanción con consecuencias directas en la clasificación. Ogier y su copiloto Julien Ingrassia conservan así el amargo segundo puesto final, tras haber liderado gran parte de la prueba.
Por lo tanto la clasificación general del Mundial de Rallyes 2018 queda tal y como estaba, con Thierry Neuville 27 puntos por delante de Sébastien Ogier justo antes del parón veraniego, que acabará a finales de julio con motivo del imprescindible Rally de Finlandia.
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