El reciente fin de semana, los encargados de transmitir el Campeonato de F4 que se organiza en China, sancionado por la FIA, se encontraron con una delicada situación puesto que el piloto Wang Yi del equipo Champ Motorsport se presentó en la parrilla con su monoplaza decorado de forma similar al Ferrari SF-24 de Fórmula 1, incluyendo el logotipo del Cavallino Rampante así como del resto de patrocinadores. Al no poseer los derechos ni tampoco estar afiliado al fabricante italiano, el promover lo que se considera un delito tendría repercusiones legales para la televisora, de allí que se tomó la decisión de distorsionar las imágenes donde apareciera Yi, quedando para la posteridad una mancha pixelada en lugar del piloto que participó en la carrera.
No es la primera ocasión que el equipo Champ Motorsport asocia su imagen a Ferrari sin tener permiso para ello, el pasado mes de abril, con motivo del Gran Premio de China, el coche salió a pista y disputó la F4 con una decoración muy similar a la de el pasado fin de semana, contribuye además que el monoplaza legalmente es rojo y además cuenta con el patrocinio de Shell, lo que favorece la asociación de imágenes. No obstante, al utilizar el emblema de la escudería italiana y también anunciar patrocinadores con los cuales no tiene acuerdo, más allá de lo anecdótico puede originar una demanda si los aludidos consideran que están vulnerando sus derechos con fines comerciales.
Lo curioso acá es que Wang Yi llegó a liderar la primera fecha y mientras los espectadores en el circuito de Shanghai podían ver al monoplaza rojo adelante, a través de las pantallas se negaba la presencia del piloto, ya sea con la imagen pixelada o enfocando la atención hacia otra parte, así que el coche 68 permaneció oculto en tomas cercanas. Según se comentó, el director de la transmisión buscó asesoría legal antes del inicio de la carrera y fue advertido de tomar precauciones porque a la hora de una demanda por parte de los afectados el mayor responsable sería quien sacó las imágenes al aire, ya existe un antecedente cuando en Europa se prohibió la publicidad del tabaco en los deportes y los encargados de transmitir los eventos tuvieron que editar las imágenes de la Fórmula 1 cuando provenían de otros países para evitar sanciones.