Toda vez que se confirmó que General Motors pausará la producción del Camaro el año que viene, desde Australia surgieron las primeras preocupaciones puesto que el Supercars, que en teoría es un campeonato de turismos, volverá a sustentarse sobre un coche que no estará disponible en el mercado comercial local, tal como ocurrió Commodore ZB tras la desaparición de Holden a inicios de 2021. Ante lo que sucede ahora, los actuales clientes de Chevrolet en el Supercars deberán esperar por la decisión de la plana mayor de General Motors en lo que respecta a la NASCAR para ver cuál será el camino a seguir.
Según el Supercars, el Camaro en su especificación Gen3 debería permanecer en la parrilla al menos hasta finalizar la temporada de 2025, para entonces es factible que en la NASCAR se haya designado un nuevo rival para enfrentar a Toyota y a Ford. Se entiende que el Camaro podría reaparecer en el catálogo comercial de Chevrolet pero como modelo eléctrico, así que no sería elegible para competir contra coches impulsados por motores de combustión interna. En este caso, desde el Supercars están dispuestos a seguir el camino trazado por Chevrolet en la NASCAR, toda vez que no tienen alternativa al carecer de otro fabricante en el campeonato para competir contra Ford.
Lo que sí causó molestias a los propietarios de los equipos afiliados a Chevrolet, responsables de alinear a catorce Camaros en la parrilla, es el tiempo que se llevó adaptar al Camaro al reglamento Gen3 para que en unos pocos meses les informen que el coche no tendrá mayor vida útil. Para los australianos no sorprende la decisión de descontinuar al Camaro, pero si en Estados Unidos tomaron ese camino, considerando lo que representa la NASCAR para sus intereses, entonces no debería de existir mayor problema en otros predios porque inclusive el Camaro ni siquiera se comercializa en Oceanía desde hace casi tres años.
En palabras de Brad Jones, propietario de Brad Jones Racing:
Creo que solo tenemos que esperar y ver qué proponen usar en la NASCAR, y me imagino que seguiremos el mismo camino. General Motors, a su debido tiempo, dará a conocer cuál es su plan y luego nos van a sugerir que nos adaptemos. Si es adecuado para la NASCAR, será adecuado para nosotros.
Vía Speedcafe