Aunque parecía que no necesariamente iba a ser un circuito adecuado para este tipo de coches y de formato de carreras, Nordschleife nos ha regalado durante los dos últimos años grandes espectáculos con motivo de la visita del WTCR al trazado germano. Macao es otra de las pistas que durante años ve competir sobre su asfalto a los GT3, en una clara demostración de que los turismos pueden regalarnos grandes momentos en trazados cuyas características parecen ser impropias para las dimensiones de dichos vehículos. Pero y si podemos hacer un ejercicio de imaginación, ¿en qué trazados poco habituales nos gustaría ver a los principales campeonatos de turismos?
Parece que esta misma reflexión se la han realizado los responsables del DTM y del TCR. El campeonato germano oficializaba esta misma mañana su regreso al Circuito de Zolder para la temporada 2020 después de extender su acuerdo con la pista belga y tras quedar satisfechos con lo visto en la edición de este año. Junto a ella, se espera que tanto Assen como Nürburgring también formen parte del calendario de la próxima campaña, aunque en el ITR no renuncian a metas incluso mayores, un futuro utópico que parece más propio de uno de esos ejercicios de imaginación a los que antes hacía referencia.
Y es que Gerhard Berger no ha ocultado durante las últimas semanas su deseo de realizar una carrera del DTM por las calles de Mónaco en el futuro. La presencia del Príncipe Alberto en Norisring, ataviado con una gorra del merchandising del campeonato levantó cierta rumorología que el propio expiloto austriaco se encargó de avivar al declarar que uno de sus sueños para las series de turismos era precisamente las de correr en el trazado urbano del principado.
También se ha hablado mucho sobre una posible carrera en Mónaco con motivo de la visita del Príncipe Alberto. Después de lo que he experimentado hoy, debo decir: mi sueño sería tener dos eventos DTM en la ciudad, uno en Nuremberg y otro en Mónaco. Ese ha sido mi deseo durante mucho tiempo, así que veamos: tal vez le guste tanto que nos abra las puertas – Gerhard Berger
Sin embargo, en las informaciones recabadas por Autosport, apuntan a que los responsables del ACM no están completamente entusiasmados con la idea de ampliar el calendario de pruebas y eventos que se celebran en Mónaco relacionados con el automovilismo. Además de la presencia de los Rallye de Monte-Carlo del WRC y el Histórico, que no alteran apenas el funcionamiento de la ciudad, el Principado acoge cada año el Gran Premio de Mónaco y sus categorías soporte, así como el ePrix de la Fórmula E y Grand Prix Histórico, los cuales se alternan cada año.
Obviamente, un cambio en el programa de monoplazas eléctricos dejaría la opción insospechada de ver a los DTM retorcerse por La Rascasse o Santa Devota, así como la posibilidad de actuar como teloneros de la Fórmula 1, algo que en la actualidad sería poco probable con tantas competiciones formando parte del programa. Nordschleife o Spa-Francorchamps son otras alternativas clásicas que parecen no formar parte de la baraja del ITR.
¿Quién da más? El WTCR en Bathurst y otras formas de fantasear
Tras verlos competir en Macao y en Nordschleife, los protagonistas de la Copa del Mundo FIA de Turismos pueden tener otros retos a la altura de una montaña… concretamente de Mount Panorama. El circuito australiano de Bathurst ya recibe en la actualidad grandes citas de turismos como la Bathurst 1000 o la competición de 12 Horas con los GT3 como protagonistas. Hace unas semanas, corrió la información de que la Confederación Australiana (CAMS) estaría trabajando en llevar a los protagonistas del WTCR al espectacular trazado oceánico, especialmente tras unas declaraciones del CEO Eugene Arocca en las que hablaba de posible “objetivo final”, sin embargo, sería acallado solo unos días más tarde.
En este caso se hablaba más sobre la opción de que el recién creado TCR Australia tuviera una de sus paradas del calendario en Bathurst, aunque no quedaba claro si a modo de una cita más o si en su lugar podría ser un evento especial. Las últimas noticias acerca de esto venían de la mano Touring Car Times, los cuales anunciaban que los organizadores del Supercars y los promotores del TCR Australia, son los dos últimos postores a organizar un tercer evento en Bathurst. El primero estaría persiguiendo crear su propia versión del Festival de la Velocidad de Goodwood, mientras que los segundos, el ARG, trabaja en crear una carrera internacional del TCR de 500 kilómetros, lo que sería un primer paso ante la opción futura de que la Copa del Mundo pueda llegar a conquistar la cumbre de Mount Panorama.
