Durante las primeras pruebas de pretemporada, realizadas en el circuito de Sydney Motorsport Park, los presentes pudieron observar la aparición de mucho fuego emanando de los escapes de los coches Gen3, lo que no sucedía desde el 2009, cuando el campeonato empezó a utilizar el combustible E85, el cual fue reemplazado este año. Esta particularidad no estaba contemplada entre las características de los coches de esta temporada, de allí que los organizadores del Supercars estén investigando las causas que originan el exceso de fuego en los escapes.
Este año entra en vigencia el Gen3, el Chevrolet Camaro acude a competir con un V8 LTR de 5.7 litros en tanto el Ford Mustang lo hace con un V8 Coyote de 5.4 litros, ambos modernos motores que más allá del número de cilindros no se asemejan en nada a los que se instalaban en el campeonato cuando se conocía como V8 Supercars. Durante las primeras pruebas se utilizó la nueva configuración mecánica con el combustible E85, lo que tal vez incidió en la aparición del fuego en los escapes, sin embargo, se espera que la situación cambie cuando se utilice el nuevo biocombustible E75.
En la zona de boxes se barajaron dos teorías, la primera es que sea la superposición y el mapeo de válvulas, un escape más corto, el paso a un solo cuerpo de acelerador y la reducción de etanol en la nueva mezcla de combustible. La segunda involucra al diseño de los motores, el cual deja mucho combustible sin quemar, además no aspira suficiente aire y por lo tanto el motor no expulsa los gases de manera uniforme. Para todos resulta extraño el fuego naranja por el uso del etanol puesto que las llamas residuales de este combustible suelen ser azuladas. Una vez determinadas las causas se analizarán las medidas a tomar, aunque para los presentes el observar el fuego saliendo de los escapes resulte espectacular.
En palabras de Barry Ryan, director del equipo Erebus:
Podría ser que la entrada de aire sea mucho más pequeña, ahora solo tenemos una y solíamos tener ocho. Tal vez el motor no puede respirar y dejar salir todos los gases, ya sea por el escape o por la entrada. Y eso da la explosión dentro del motor. Eso es algo en lo que he pensado. Se acumula más combustible en el colector que en la caja de aire. Y es una llama naranja, lo cual es extraño para el etanol, pero es genial.
Vía Autosport
