El cuerpo técnico del campeonato australiano de turismos decidió esta semana que en aras de la competitividad, se ajustaría el centro de gravedad de los coches participantes, siendo el Ford Mustang el más afectado ya que cada unidad tendrá un lastre adicional de 30 kilos, en tanto el Holden Commodore tendrá 6.7 kilos y el Nissan Altima se mantendrá en su actual peso. La medida entrará en vigencia a partir de la Tasmania SuperSprint a disputarse el próximo fin de semana.
Hasta ahora, el Ford Mustang se ha mostrado muy superior a sus rivales en lo que va de campeonato, situación que requirió la intervención del departamento técnico del Supercars para intentar emparejar el rendimiento y así propiciar un mayor espectáculo en los circuitos. DJR Team Penske y Tickford Racing, equipos oficiales de Ford en el campeonato han declarado que aceptarán la decisión y cumplirán con las reglas, aunque ello les afecte. No es la primera vez que se aplica una medida así en el Supercars, pero por lo regular el afectado era Holden ya que el modelo anterior de Ford, el Falcon, tenía varios años desactualizado.
Desde Tickford Racing se pronunciaron al conocer la medida y en un comunicado de prensa se puede leer que el trabajo realizado para correr con el Mustang en el Supercars ha dado resultados extraordinarios porque construyeron un exitoso coche que cumplió con las regulaciones y homologaciones requeridas para participar y ahora han sido castigados por ganar. Con todo y el nuevo peso adicional, igual continuarán aspirando a los triunfos y al campeonato ya que disfrutan la emoción de competir en una categoría que se ha caracterizado por su paridad técnica.
Vía | Speedcafe