Era el broche final a una temporada que no ha estado cerca de satisfacer las expectativas que se habían puesto sobre el rendimiento de Andreas Mikkelsen. El piloto noruego comenzaba el Rally de Australia como una de las piezas claves de Hyundai a la hora de luchar por el título de constructores. Sin embargo, todo se echaba a perder cuando en el tercer tramo de la mañana el Hyundai i20 WRC Coupé se salía y golpeaba unos árboles. Game Over.
Lo que parecía un error impropio de un piloto de su calidad quedaba explicado posteriormente al ver las imágenes del accidente. Solo un centenar de metros antes del lugar en el que escandinavo se salía se podía ver a un comisario advirtiéndole de algún peligro en pista a través de unos gestos con las manos. Tras una chicane artificial se vería entonces un tractor de gran tamaño que avanzaba lentamente. A pesar de que no impedía el paso de Mikkelsen, la situación desconcentró completamente al piloto de Hyundai, el cual al llegar a la siguiente curva perdió toda referencia de las notas y se salió, acabando su rally de forma prematura.
Lo que sucedió hoy resume bastante bien mi temporada, para ser honesto. Nos acercamos a una cresta y vimos a un comisario que nos hizo un gesto para reducir la velocidad. Anders me dijo que parara, así que reduje la velocidad y vi un tractor después de la chicane. Continuamos, pero mi cabeza estaba un poco fuera de lugar en lugar de atender a las notas y nos salimos. Estoy decepcionado y enfadado. Esta situación destruyó un rally realmente importante para nosotros y nunca debería haber ocurrido.
No es la primera vez que suceden este tipo de problemas o brechas de seguridad en el Mundial de Rallyes. Hyundai Motorsport la sufrió hace algunos años en Alemania mientras Thierry Neuville estaba de test, mientras que el año pasado, en el Rally de Polonia, la entrada de un camión de bomberos a contra tramo incidió mucho en la decisión de la FIA de dejar fuera del calendario a la prueba. Ahora seguramente la Federación, después de ver dañado el espectáculo de la última cita del WRC por este suceso, a buen seguro insistirá en que las organizaciones tengan especial cuidado con estas situaciones.
En cuanto a los intereses de Hyundai en ambos campeonatos, este abandono repercute negativamente a sus opciones, especialmente en constructores, donde Hayden Paddon en cuarta posición es el mejor i20 WRC clasificado, mientras que Thierry Neuville es décimo y saldrá a los tramos del sábado en segunda posición en el orden de la competición. El belga deberá hacer la danza de la lluvia durante las próximas horas. Mientras tanto, Sébastien Ogier cuenta con el valioso apoyo de Teemu Suninen y Elfyn Evans que le hacen las veces de gregarios abriéndole pista y Toyota por ahora mantiene a sus tres coches dentro del Top 6.