Al menos ese es el plan del promotor del campeonato: llevar los rallyes del WRC a más lugares, y a poder ser, a otros continentes. Y es que Oliver Ciesla y los suyos siguen con la idea de que el calendario del Mundial de Rallyes crezca hasta las 16 pruebas y que, a poder ser, sólo la mitad se celebren en el viejo continente. Obviamente este movimiento supondría un efecto mariposa, ya que, con el actual formato, sería inviable especialmente por tema de costes.
Recordemos que en el pasado ya se ha hablado de esta posibilidad, e incluso los promotores del campeonato hablaban de reducir los días de competición para las pruebas europeas (la opción de eliminar el shakedown no parece viable) como una de las posibilidades. Obviamente ‘novias’ no faltan. De un tiempo a esta parte han sido muchos los países que han presentado su candidatura, reforzándose opciones que parecían muy sólidas, entre las que se encontraban Japón, Chile, Canadá o la opción de una prueba en el desierto, previsiblemente en Oriente Medio.
Estamos en México y Argentina en América. Chile es una gran opción, además, fácilmente podemos imaginar otra cita invernal en Norteamérica, no importa si Michigan o Canadá. Además de Australia, Nueva Zelanda está listo otra vez para acoger una prueba del campeonato. China sigue siendo un problema y, por último, pero no menos importante, en dos o tres años puede formar parte del WRC Japón o Corea, ya que los fabricantes implicados son de allí. Un Rally Safari en Kenia fue presentado, así como una prueba en el desierto en Medio Oriente. También tenemos a India, Turquía y Rusia.
Incluso Ciesla, en su entrevista a Motorsport Aktuell, ha querido poner cifras a la idea, hablando de cuatro citas en América (por ejemplo Argentina, México, Chile y Canadá) y otras cuatro en Asia-Oceanía (Australia, Nueva Zelanda, Japón y China), a las que se sumarían 8 carreras en Europa y África.
Vía | Rallye-Magazin
