Para el Gran Premio de España, la escudería Visa Cash App RB adelantó que presentaría un monoplaza evolucionado que sería un gran paso adelante con respecto al desempeño que estaba mostrando a inicios de temporada el VCARB 01, lo que hacía suponer que lograrían puntos sin mayores dificultades. Sin embargo, las expectativas se desplomaron de inmediato porque las actualizaciones enviaron a Daniel Ricciardo y a Yuki Tsunoda al fondo de la parrilla durante todo el fin de semana.
Tanto Laurent Mekies, jefe del equipo, como Jody Egginton, director técnico, todavía no se explican qué pudo salir mal para experimentar semejante retroceso de una carrera a otra, cuando los análisis y las simulaciones indicaban que con la nueva versión del coche estarían en mejores posiciones. Ambos evidenciaron su decepción ante lo mostrado en España porque significa que el programa de desarrollo se desvió por un camino equivocado, así que el tiempo y los recursos invertidos en investigación, diseño y fabricación de piezas están en vías de perderse.
Explicó Egginton que resultó frustrante observar a Daniel Ricciardo tratando de acercarse al grupo de Fernando Alonso, Lance Stroll y Valtteri Bottas que luchaba fuera de la zona de puntos, sin ritmo suficiente como para pelear por tales posiciones. Peor aún, Yuki Tsunoda durante todo el fin de semana se quejó del equilibrio de su monoplaza y por más que los ingenieros y técnicos trataron de solventar los problemas, no fue posible, inclusive se probaron todos los ajustes en el alerón delantero y con ninguna configuración el piloto japonés pudo sentirse cómodo, razón por la cual jamás fue competitivo. Sin duda, hay mucho trabajo por hacer en el área técnica para comprender qué fue lo que sucedió y luego revertir los resultados. El Gran Premio de Austria está cerca y no pueden permitirse otra carrera lejos de los puntos y con tantos inconvenientes.
En palabras de Laurent Mekies:
Vinimos a Barcelona con grandes esperanzas, todos en la fábrica han trabajado muy duro para diseñar y fabricar piezas como parte de nuestra agresiva estrategia de desarrollo. Desafortunadamente, desde el inicio de los entrenamientos libres, nos faltó ritmo en cada sesión. No se puede negar que este fin de semana fue malo para nosotros y, aunque las diferencias fueron muy pequeñas, no vamos a disculparnos por perder competitividad. Hemos realizado muchas pruebas de carrera en ambos coches, ahora los ingenieros se enfrentan a una dura prueba para intentar progresar antes de ir al Red Bull Ring.
Vía Nextgen Auto