Volver a comenzar un proyecto desde cero no es nada fácil. En Renault lo saben bien, después de la compra a finales de 2015 de Lotus, volvieron a la Fórmula 1 como equipo. La firma francesa ha tenido que superar muchos retos y contratiempos a lo largo de su vuelta a la máxima competición.
Los problemas presupuestarios han sido uno de los principales inconvenientes que se han encontrado en los últimos años. Los franceses comenzaron con un presupuesto similar al que tenían en su etapa como proveedor de motores, que sumado a los derechos de la Fórmula 1 y los beneficios de los acuerdos publicitarios con algunos patrocinadores, sería más que suficiente para llegar al final de temporada.
En Renault siguen en sus treces de tener un control exhaustivo de sus gastos. Carlos Ghosn (CEO de Renault), se ha mostrado seguro en afirmar que tienen muy claro el proceso que deben seguir para alcanzar su objetivo de estar en el podio en los próximos dos o tres años. Es por ello, que desde el equipo siguen avanzando con la limitación presupuestaria autoimpuesta.
La firma francesa considera que es importante tener una limitación presupuestaria y exprimir todos los recursos al máximo para obtener su objetivo. Desde Renault saben que están trabajando en equipo y que poco a poco se están acercando a sus objetivos a corto plazo. De este modo, no es necesario contratar a algunos profesionales del paddock que están en otros equipos para sacar el trabajo adelante.
El Mundial sigue su curso y en Renault no se rinden tan fácilmente. El presupuesto por ahora no es uno de sus principales inconvenientes y siguen llevando evoluciones a los Grandes Premios. Faltará por ver que les depara el futuro, puesto que será interesante saber que sucederá finalmente con Carlos Sainz Jr. que está cedido a Renault solo por esta temporada y Red Bull tiene la última palabra.
Nos estamos preparando para volver al cajón más alto del podio para 2020. El objetivo es ganar en unas condiciones económicas responsables. Por supuesto, si no hubiera (un límite) de presupuesto, contrataríamos a los mejores pilotos del mundo.
Vía| La Presse
