Ya la relacionamos 100% a ella como piloto de coches, todo ello, a pesar de que, si lo pensamos con detenimiento, no hace tanto que estaba subida a la moto surfeando las dunas de Arabia Saudí. Laia Sanz se estrenó el pasado mes de enero dentro de la categoría de coches y menos de un año después, afronta un nuevo reto junto al equipo Astara. La catalana se baja prácticamente hace unos días del ODYSSEY 21 y de esa espinita de no haber podido competir hasta el final por el título de la Extreme E, para centrarse el próximo 31 de diciembre en esta nueva edición del rally-raid más famoso del planeta.
Pudimos sentarnos tranquilamente para charlar de su evolución como piloto de las cuatro ruedas, de lo que espera de cara a este año y de sus proyectos futuros, tanto en el Extreme E como en el Dakar, especialmente después de que su nombre ya haya sido relacionado con algún que otro proyecto entre los T1+, concretamente con el de Ford M-Sport y el Ranger que se está desarrollando en colaboración con NWM.
Aunque fue más breve de lo que sin duda gustaría debido a la profundidad de la protagonista, nos dio tiempo para hablar prácticamente de todo un poco, incluso de los temas más delicados como lo es la propia seguridad de la carrera, la cual se llegó a poner en entredicho en el pasado Rally Dakar 2022 por los sucesos ocurridos en los primeros días y en la previa del inicio.
Entrevista con Laia Sanz – Rally Dakar 2023:
Pregunta: Te hemos visto dar grandes pasos durante este año dentro del Extreme E, así como evolucionar en otros campeonatos muy competidos como es el caso del rallycross. ¿Tú también notas ese desarrollo como piloto de coches?
Respuesta: Estoy muy contenta. Obviamente el Extreme E tienes un poco ese sabor agridulce porque creo que hemos sido muy competitivos junto a Carlos y creo que merecíamos estar un poco más en la parte delantera por todo lo que pasó en Cerdeña, pero en cuanto a ritmo, muy contenta en cuanto a evolución. El año pasado fue un año duro porque evidentemente estaba muy verde y tampoco el campeonato es el mejor para ganar tiempo en pista y nadie nace enseñado, por lo que había que aprender muchas cosas. Son carreras muy al sprint y entonces no era el sitio para sentirse mejor, pero yo creo que este año ha cambiado bastante. Creo que he tenido una muy buena evolución, Carlos es una pasada, me está ayudando muchísimo. Intento ser una esponja porque cada carrera es una Masterclass y me ha ayudado mucho, no sólo en cuanto a pilotaje, sino a entender el coche, entender las suspensiones. Todo eso me está ayudando y me siento más preparada para este Dakar. Al final no he hecho tantas cosas durante el año, pero creo que las que he hecho las he hecho de calidad. El Extreme E y el RallyCross te hacen ponerte las pilas desde el principio e ir a tope desde el arranque todavía más y creo que me ha ayudado a mejorar, como piloto y en cuanto a la puesta a punto del coche. Me siento muy preparada para este Dakar, soy muy optimista.
P: Aun así, es cierto que llegas con pocas horas de ‘vuelo’ con un buggy de este tipo…
R: Es la única parte negativa. Creo que al final también en Extreme E he tenido que adaptarme rápido, al final, mis primeros años en moto… antes no hacía falta ir al Dakar o a ningún rally para hacer esta carrera. Me acuerdo que cuando debuté no había hecho ni un solo rally-raid, no había probado nunca una moto de rally… al final he ido superando dificultades. Obviamente me hubiera justado hacer una carrera, aunque fuese pequeña, una Baja Ha’il por ejemplo con este coche para poder ponerme a punto a su volante. He podido entrenar un poco con él y lo que he probado me sorprendió. Sí que iba con algo de miedo al principio, especialmente en las dunas antes de probarlo, pero realmente cuando lo hice me sorprendió. Sí que hay algo menos de visibilidad, es un coche más estresante en las dunas. Tienes que mantener la velocidad, no puedes frenarlo mucho y sí que si te clavas es una liada, pero creo que si te acostumbras y te adaptas, entendiendo un poco el buggy, creo que podemos ser mucho más competitivos que el año pasado, especialmente porque luego en la arena puedes ir muy rápido si no son dunas muy cortadas y después en las pistas rápidas, con las piedras, que es algo dónde sufríamos mucho el año pasado con nuestro coche, especialmente porque frente a los T1+, aunque el MINI 4×4 era un gran coche, ya tenía unos cuantos años y yo al menos, cuando lo acabé, tuve la sensación de que quería algo más, de que necesitaba un paso adelante y con este Astara tengo esa sensación.
P: Se suele decir que conducir este tipo de buggies como el Astara Concept 01 se puede asemejar mucho con una moto, ¿es así?
R: Sí, la conducción de estos buggies es algo que hemos he hablado con Maurizio y es verdad, creo que el feeling de la moto puede ayudar mucho. El jugar con el gas, regular para no clavarte, es así y creo que al final me puede venir bien la experiencia de la moto porque es muy similar. Obviamente con la moto te clavas y te desclavas en 10 segundos, en el coche puedes tardar muchos minutos, y más con un buggy. Pero sí, creo que puede ayudar mucho ese feeling, y creo que los motards tenemos ese tacto de gas para las dunas, luego el auto hinchado también va a ayudar. Cuando se complica, bajas la presión y se nota mucho, además de tener un gran motor.
P: Y los pinchazos… Este año parece que podrás estar más tranquila en este aspecto, ¿no?
R: Estaba ya de bajarme del coche al final cansada… Luego hablabas con gente que había ido con coches similares al buggy y a lo mejor en todo el Dakar no se habían ni bajado del coche y eso también sumas minutos cada día y al final se nota. Luego nosotros además teníamos que ir lentos en las zonas de piedras, por lo que pensar que ahora podremos empujar mucho más en estas zonas
P: ¿Consideras entonces que es un gran paso adelante respecto a los últimos años?
R: También creo que nosotros hemos mejorado bastante, tanto Maurizio como yo hemos mejorado bastante. Al coche sólo le penaliza las dunas que son muy juntas, muy cortadas, muy técnicas. Cuando son dunas con ‘flow’ digamos, no pierdes mucho. Luego respecto al año pasado, en las piedras, no tiene color. Estoy muy contenta, aun así. El año pasado es cierto que teníamos muchas dunas, pero también teníamos zonas en las que ‘palmábamos’ mucho tiempo
P: Con todo ello, ¿cómo planteas la carrera a partir del 31 de diciembre y con los cambios que se han realizado en cuanto al reglamento y las modificaciones en el orden de salida?
R: No podremos dormirnos. Si salimos en un prólogo en el que está todo el mundo a tope, no es fácil meterse entre los 40 primeros, más aún cuando llegas con pocos kilómetros como es mi caso con el coche, y eso es algo que nos puede condicionar muchísimo los primeros días porque luego cuesta salir de esa rueda una vez estás detrás. La pista está lenta, la pista está rota, yo creo que perdíamos más de media hora cada día sólo por ese factor pista. Será muy importante salir despiertos. El año pasado quizás pequé de conservadora, era mi primer Dakar, era el prólogo, había que ver cómo iba todo… Ahora creo que hay que ir un poco más al ataque, pero sin liarla en el prólogo. Luego las etapas que sean más largas me gustan, yo creo que un Dakar tiene que ser duro, que no sea tanto al sprint, creo yo. Tienen que pasar cosas, que la gente se pierda, entonces me gusta la idea de que haya menos enlaces y más kilómetros cronometrados
P: Además, con la gran noticia de que se eliminan los repostajes… ¿Se va a notar eso en la dureza para los pilotos?
R: Los 500 kilómetros del tirón obviamente se van a notar, especialmente los que mejor lleguen físicamente. Los finales de etapa se van a hacer duro. Claro, yo no lo he hecho nunca, pero los que competían en coche hace tiempo ya lo han experimentado. Yo que vengo de la moto evidentemente siempre hemos tenido que parar a repostar. Lo que peor llevo o lo que más palo me da es lo de los pañales. Un poco incomodo. Para el tema de comer y beber bien, esto hará que complique también la carrera porque no vas a poder seguramente alimentarte igual que si paras 20 minutos
P: ¿Cómo ves el recorrido del Dakar 2023 y ese inicio en el Mar Rojo y el final en el Golfo Arábigo, además de la visita al Empty Quarter?
R: El hecho de que empieces en un lado y acabes en el otro es chulo. Tenemos etapas más bonitas, luego el Empty Quarter, no he estado en Arabia, pero he estado en Abu Dhabi, haciendo el rally allí y es muy bonito. No sé lo difícil que va a ser, pero creo que va a haber Dakar hasta el último día, va a haber arena, va a haber lío
P: Hablando de líos, ¿qué opinas de lo sucedido en el Dakar 2022 nada más comenzar?
R: Creo que el día de la pérdida gorda que hubo, yo nunca he sido de criticar cuando se pierde… la nueva generación de motards por ejemplo: “no, es que el roadbook estaba mal…”. Parte de la gracia de los rallyes es saber encontrar el punto lo más rápidamente posible, la interpretación del libro de ruta, pero ahí realmente seguimos el CAP, es fácil de seguir y el WayPoint no estaba donde tocaba. Ostras, que condicione algo así tanto el primer día, fue algo raro. Allí sí que fue un problema de la posición del WP
P: Con tantas ediciones de la carrera a tus espaldas, ¿cómo ves este nuevo Dakar saudí bajo la batuta de David Castera?
R: David tiene mucha experiencia, yo creo que le gustan los Dakar duros, además lo ha corrido y sabe de lo que va realmente, de lo que tiene que ser la carrera. Luego también es un tío que escucha. Las quejas del año pasado de la primera semana de salir delante se solucionaron un poco durante la segunda semana y creo que es guay que alguien cómo él también está guay de que escuche porque también los pilotos somos al final los que corremos. Castera sabe muy bien de qué va el Dakar, seguro que pone un recorrido interesante
P: Aunque a los dakarianos nos duele mucho, ¿cómo se vive desde dentro cuando hay problemas de seguridad y atentados como los que se produjeron el año pasado?
R: Yo sinceramente no me enteré. No nos dimos cuenta. Nos enteramos de todo lo que había pasado en el día de descanso. Realmente es una pena que pase eso, pero quizás es una buena solución que nos lleven directamente al vivac y creo que también ayudará al ambiente dakariano. Creo que estaremos todos más tranquis. El hecho de estar unos días previos también ayudará para estar más tiempo con el equipo y compartir con otros pilotos que a lo mejor otros años hasta que empieza la carrera casi ni los ves
P: Además, con unas Navidades seguramente algo más atípicas que otros años debido al inicio en 31 de diciembre…
R: Al menos Navidad estaremos en casa. Los Reyes ya no los recuerdo y luego el fin de año… será atípico. Con el prólogo el 31 de diciembre va a ser chulo. Luego yo no soy alguien que celebre mucho el fin de año, por lo tocará vivirlo en familia con el Astara Team
P: Y con Maurizio Gerini, tu mano derecha, por curiosidad, ¿en qué idioma te canta las indicaciones y las notas porque hemos visto que de castellano sabe poco y especialmente ‘tacos’?
R: Me canta las notas en italiano. Todo el mundo nos lo pregunta porque yo hablo bien en italiano, he vivido en Italia, así que me sale casi natural y él habla cuatro palabras de español y ya tiene suficiente trabajo traduciendo lo que sale en el Roadbook y explicándolo… Yo lo que quería es que saliese natural. “¡Hostia, ojo!” y sale natural hablando en su idioma. Yo como lo entiendo pues quería eso… Hasta me cago en todo en italiano dentro del coche (Risas)
P: Me gustaría preguntarte finalmente por esas informaciones que se están dando las últimas semanas y que te relacionan con un posible asiento en una de las Ford Ranger T1+ del equipo M-Sport para el Rally Dakar 2024. ¿Hay algo de cierto? ¿En el Extreme E también en 2023?
R: (Sonríe)… Hay que hacer un buen Dakar este año, yo creo que mi objetivo era dar un paso adelante, estoy muy contenta, Maurizio también. El 2024 queda muy lejos. Vamos a hacer un buen Dakar, dar una buena imagen, ser competitivos este año y yo creo que tenemos un muy buen equipo. Extreme E si todo va bien, sí.