Quedan menos cinco horas para el primer Gran Premio de la temporada. Las semanas de espera, los rumores, las teorías sobre el rendimiento o los secretos de cada uno de los monoplazas quedarán atrás durante algo más de 90 minutos para poder apreciar el que es considerado uno de los mayores espectáculos del planeta. Comienza así un año en el que el duelo entre Sebastian Vettel y Lewis Hamilton promete hacer saltar chispas por ver quién de los dos es capaz de igualar los cinco títulos de Juan Manuel Fangio y pasar a la historia junto al mítico Michael Schumacher.
Cuatro años después de su último título, Vettel empieza a notar la presión que supone vestir los colores de Ferrari y ver cómo las temporadas en blanco siguen pasando. Los de Maranello no quieren volver a dejar pasar la oportunidad después de un 2017 en el que comenzaron muy fuertes, pero en el que las opciones se esfumaron tras el verano por errores cometidos por la estructura, tanto en materia de fiabilidad como en estrategia. Para ellos la sequía es incluso mayor hasta tal punto de que algunos de los integrantes no han vivido nunca un título de la Scuderia desde dentro.
Por su parte, Hamilton parece seguir viviendo un cuento de hadas. La marcha de Nico Rosberg fue posiblemente uno de sus grandes regalos como piloto de Fórmula 1 y la forma que actualmente demuestra es absolutamente espectacular. El nivel de perfección en su pilotaje queda demostrado con poles como la lograda este sábado en Albert Park. El británico nunca se ha marcado una cifra de títulos o victorias, pero ha demostrado en más de una ocasión que no sólo tiene ambición por seguir ganando, sino que también le da mucha importancia al hecho de superar a sus ídolos y a los iconos clásicos del Mundial. Hasta aquí, nada nuevo, pero… ¿qué hay más allá de esta posible lucha cerrada por el título de pilotos entre los dos tetracampeones?
La recuperación de Red Bull Racing. El monoplaza ha dejado señales positivas durante los dos días previos y de no ser por el error de la vuelta de Max Verstappen podríamos estar hablando de que uno de los dos Ferrari habría sido relegado en la parrilla. El holandés está entonado, ya no es un novato (difícilmente se puede utilizar este termino con él) y además cuenta con la tranquilidad de tener contrato al menos hasta 2020. En cambio, a Daniel Ricciardo el equipo promete no darle demasiada manga ancha. Christian Horner, Helmut Marko o Dietrich Mateschitz quieren que siga el australiano, sin embargo, cuanta más presión ejerza Ricciardo con su renovación, más jugarán sus cartas desde el equipo, el cual ya ha demostrado en más de una ocasión que no les gusta este tipo de juegos.
Renault con el cuchillo de doble filo en la mano:
La incógnita Renault. Está claro que no sólo Red Bull está muy atenta a la evolución de la unidad de potencia de la firma del rombo. La llegada de McLaren promete también añadir algo más de responsabilidad a una marca francesa que tiene un cuchillo de doble filo… a nadie le gusta perder contra dos equipos clientes que utilizan el motor que tú les has cedido. La vuelta de Carlos Sainz en Q2 deja entrever que hay margen de mejora y desde luego talento no le falta ni al madrileño ni al alemán.
McLaren se encuentra de nuevo sin excusas. Durante las tres últimas temporadas, el nefasto rendimiento de los propulsores Honda ha sido el perfecto paraguas sobre el que se han resguardado los problemas que pudiera tener el equipo a la hora de construir su chasis y de poner a punto el resto de elementos del monoplaza. Ahora ya no habrá lugar a estas excusas si vemos a Red Bull y Renault ir hacia delante utilizando su mismo motor. A pesar de la fiabilidad, el rendimiento puro parece haber satisfecho a Fernando Alonso, por lo que las primeras impresiones tras los malos test de pretemporada parecen ser correctas. ¿Hasta dónde pueden llegar?
¿Hasta cuándo mantendrá el rendimiento HAAS?
La batalla por la tierra media. Y es que el buen tono marcado por HAAS F1 Team promete un comienzo de Mundial en el que podemos encontrarnos una preciosa batalla entre cuatro equipos por situarse tras las tres escuderías de cabeza. ¿Cuánto les durará el gas a los norteamericanos? Esa será una de las cuestiones principales para saber si esta batalla se mantiene hasta la llegada del verano. Force India y Williams pueden haberse despertado demasiado tarde de este invierno, aunque seguro que en circuitos de motor volverán a meterse en la pelea.
Obviamente Toro Rosso no contará con un apoyo competitivo sin precedentes por parte de Honda en este nuevo inicio para ambas partes, al menos por el momento. Lo que se ha dejado entrever durante estos primeros kilómetros de temporada es que estarán en la lucha por evitar las posiciones de cola que en teoría podían ocupar Alfa Romeo Sauber, sin embargo, han dado un gran paso al asegurarse un mínimo de fiabilidad al que los nipones no habían llegado durante los últimos años. Este año, con sólo tres motores para 21 carreras, el drama de las roturas va a estar muy presente y obviamente tendrá gran incidencia entre los equipos que forman parte de esta segunda mitad de tabla.
No perdáis de vista al rookie, no os perdáis el espectáculo Leclerc:
El factor Charles Leclerc. ¿Quién no ha seguido la andadura del monegasco durante los últimos años hasta su llegada a la Fórmula 1? El piloto de la órbita de Ferrari ha dado muestras de ser todo un talento natural al volante de un monoplaza. Las carreras en las que se encuentra inspirado, que no son pocas, es imposible de contener y en F2 ya demostró que es imposible de parar cuando lanza uno de sus certeros ataques. Es sin duda uno de los pilotos más observado de la parrilla, especialmente por una Ferrari que busca ya recambio para un Kimi Räikkönen que deberá hacer mucho más que en 2017 para mantenerse un año más en la Scuderia. Con el resto de pilotos de su generación tomando otros caminos lejos de la Fórmula 1, el finlandés debe dejar por un momento su carácter de lado para dejarnos el que puede ser el último canto del cisne.
Valtteri Bottas es otro de los hombres que se la juegan. El año pasado consiguió convencer a Mercedes AMG F1 con su rápida adaptación y sus victorias, sin embargo, la renovación por solo una temporada demuestra que en el equipo de Toto Wolff quieren algo más por parte del finés y, desde luego empezar el año con un accidente en clasificación no es la mejor forma de hacerlo en el que demostró ser uno de sus puntos fuertes. Si Ferrari sigue demostrando un gran ritmo de carrera, mucho mejor que a una vuelta, Valtteri es vital para los intereses del equipo de ampliar una temporada más su dominio.
A todo esto le tenemos que sumar la vuelta de Francia al calendario, el adiós a Malasia o el afán de Liberty Media de “hacer a la Fórmula 1 grande de nuevo”. La campaña 2018 está a punto de comenzar, ¿estáis preparados?
