Ha sido una de las polémicas de la semana. Fernando Alonso aprovechaba el regreso a la acción del Mundial de Fórmula 1 para soltar unas declaraciones bomba: Red Bull Racing había contactado con él para tratar de contratarlo como sustituto de Daniel Ricciardo, algo que fue negado prácticamente de forma inmediata por la propia escudería. Sin embargo, el asturiano no estaba dispuesto a que desde la formación de Milton Keynes le dejaran en mal lugar, por lo que contratacó apuntando a que este 2018 había recibido hasta dos muestras de interés por el equipo dirigido por el mismo Christian Horner que apuntó hace unas semanas que el bicampeón creaba problemas por cada equipo por el que pasaba.
El propio Alonso reconocía que esperaba una disculpa y daba datos concretos en los micrófonos de Sky Sports F1 acerca de las temporadas en las que había recibido ofertas por parte de Red Bull: “las tuve en 2007, 2009, 2011, 2013 y dos en este año, una en Mónaco y la otra en agosto”. El ovetense dejaba entrever su enfado ante las declaraciones tanto de Horner como de Marko, apuntando que estaba “completamente fuera de contexto” y negando que fuera un hombre con el que trabajar fuera difícil.
Uno, ellos nunca han trabajado conmigo, segundo, ellos han tratado de contratarme en cinco o seis ocasiones en los últimos siete años, y ahora dicen esto, que ellos son leales a su programa y los compromisos con sus pilotos júnior. Es raro, es injusto conmigo. Escribí a Christian después de sus comentarios este verano, él se disculpó por email y espero que también lo haga este fin de semana.
Las declaraciones han venido acompañadas durante las últimas horas de los motivos que llevaron a Fernando Alonso a descartar un posible fichaje por Red Bull, equipo que consiguió dominar el Mundial de Fórmula 1 durante casi un lustro y la única alternativa a la bicefalia Ferrari vs Mercedes durante los últimos años. Sin embargo, la llegada de Honda al equipo no parece ofrecer las garantías suficientes al asturiano para considerar al equipo austriaco como un aspirante a las victorias.
He tenido otras ofertas por supuesto. No creo que mis objetivos o mis retos para el año que viene estén en la Fórmula 1. Las ofertas que he tenido, incluido esta, no son para luchar por ganar. Ellos están probablemente en términos de rendimiento, a más de un segundo de la pole position tal y como hemos visto. Para ser quinto o sexto o séptimo no será el mismo reto o entusamos que el que puedo encontrar lejos de la Fórmula 1 en 2019. Tomé mi decisión hace un par de meses y estoy extremadamente contento con ella.
En lo referente a las anteriores ofertas, Alonso ha dejado entrever que nunca terminó por recalar en Red Bull por una cuestión de tempos, apuntando a que la oferta que llegó en 2007 junto a la de Toyota fue rechazada porque era un equipo joven, mientras que las que recibió a inicios de esta década coincidieron con su paso por Ferrari o justo en el momento en el que estaba decidiendo si unirse a la Scuderia.
Fue un tiempo estresante para mí. Tenía algo así como cuatro días para decidirme y yo estaba conversando seriamente con Ferrari. En aquel momento yo pensé que Ferrari era la opción más segura y la mejor alternativa para el futuro. Estoy todavía orgulloso de haber tomado aquella decisión. Si tu tienes una bola de cristal tal vez cambies de opinión, pero si no, tú no dirás que no a Ferrari.
Vía | Autosport