Fernando Alonso ha vivido otro día extraño en Monza. Se esperaba que el piloto de McLaren cayese en la Q1 del GP italiano hasta que los errores de varios equipos y una mejora en el set-up del MCL33 ha dejado al español en la Q2, una sesión inesperada apenas un día antes. El incidente con Kevin Magnussen dejó al asturiano 13º, en la estacada de la zona media y con posibilidad de retroceso en la carrera dominical. «Preparaba mi vuelta buena en la Variante Ascari, es donde solemos levantar el pie y respetar las distancias respecto a los demás. Su decisión hizo que no completase mi vuelta», explicó en relación al problema con el danés.
Prgeuntado por una posible actuación errónea en el choque, Alonso cree que no hay que culpar a nadie en la acción. «Sencillamente pensaba que esa posición junto a Magnussen era la más adecuada. Quizá no me vio venir pero él perdió más de lo que podía perder yo, es una situación infortunada». La mejoría del coche en comparación con el viernes se explica por una combinación de cambios en un set-up más agresivo. «Ayer no fuimos nada competitivos, igual que en Spa, pero hoy hemos sido un poco más rápido. El set-up de Monza es muy específico y hemos podido encontrar soluciones tanto en fábrica como con el equipo desplazado aquí».
Prefiero Alonso ser cauto respecto a sus opciones de futuro, definiendo que en la IndyCar Series puede hacer tres cosas: «la Indy 500, el campeonato completo o ninguna de las dos». El fin de semana sigue siendo algo prudente para el ovetense, que considera que pueden seguir peleando». «No es fácil ganar posiciones en la primera curva de Monza, hay que evitar accidentes y beneficiarse de los problemas ajenos. Tenemos coches por detrás que irán más rápidos pero lo más importante es ver la bandera a cuadros y luego ya veremos si nuestro esfuerzo sirve para puntuar».