Cuando habla Fernando Alonso, sube el pan. Una máxima clásica de la Fórmula 1 que casi apuesto lo que sea a que se va a mantener incluso después de que el asturiano salga de la categoría reina. Es lo que tiene una cantidad de talento inversamente proporcional a los pelos que tiene en la lengua. Y si además, como es el caso, tiene cosas interesantes que decir incluso cuando no quiere decirlas, la combinación es perfecta para que sus comparecencias de prensa estén hasta la bandera. En Singapur, tuvo varias frases lapidarias aunque quizás la más ‘mamporrera’ fue justificar su marcha de la Fórmula 1 explicando que esta «no puede ofrecer emociones» y que no es el lugar en el que tiene que ser feliz. Todo esto, dicho en el paddock de la Fórmula 1, claro. Brillante.
«La Fórmula 1 no es el lugar en el que estar. No puede ofrecer nada emocionante». Así de potentes son las palabras con las que Fernando Alonso empezaba su rueda de prensa pre-Gran Premio de Singapur. Se trata de una rueda de prensa muy a su estilo y a lo que le representa actualmente. Mucha miscelánea sobre el propio asturiano y poca Fórmula 1, siendo buena parte de ella sobre otros competidores. Más allá de que tenga o no talento para seguir en caso de que hubiera un volante, lo que está claro es que en la categoría reina, Alonso es un producto más del pasado que del presente. De hecho, cuando se le preguntó por ciertos elementos pasados, la respuesta del bicampeón fue recordar que estamos en 2018 y que no hablará del pasado.
Alonso también tuvo palabras para los prometedores jóvenes que suben como nunca en la Fórmula 1. Pierre Gasly, Lando Norris y Charles Leclerc han sido tres protagonistas este verano y lo han sido por derecho propio, aunque Alonso recordó algo esencial: en todos esos casos, se trata de pilotos que vienen de programas de desarrollo de jóvenes talentos y por lo tanto es lógico que si destacan, los equipos principales quieran subirlos a sus coches. Por ello y aunque se le preguntó, Alonso afirmó no tener ninguna sensación concreta sobre estos u otros talentos de edad reducida que parecen estar llamados a dominar la Fórmula 1. Tampoco quiso mojarse demasiado sobre la decisión de Kimi Räikkönen de seguir en la Fórmula 1 con Sauber, aludiendo a la diferencia entre pilotos.
Pero seguramente (y curiosamente teniendo en cuenta que estamos en Singapur), lo más interesante que contó Alonso tuvo que ver con la NASCAR y sus ideas de otras categorías. Cuando se le preguntó por el certamen americano, Alonso afirmó que es un campeonato atractivo con cosa sbuenas (y malas) y que es una de las grandes competiciones automovilísticas internacionales. Aún así, reconoce que es difícil juzgar a día de hoy ciertas categorías, aunque reconoció que «tiene cierto atractivo». Habló también de su test con el coche de IndyCar, remarcando lo divertido que es de pilotar, como también que es muy distinto y sobre todo que es más exigente físicamente.
Sobre sus planes de 2019, poco pero muy claro: «Lo que haga el próximo año se basará en lo que me haga feliz. El objetivo es ser el mejor piloto del mundo del motor, no solo de Fórmula 1. Espero poder tomar una decisión final en octubre o noviembre y poder contarlo todo», declaró. El español reconoció también que si se plantea correr en algún sitio para el que no se siente preparado, pospondría su ‘ataque’ para ir en cuanto sí estuviera listo. Pero sí dejó clara una cosa sobre su futuro: «Tomaré en cuenta a Daytona», hablando de las 500 millas, la cita más histórica de la NASCAR. Finalmente, opinó que es difícil que vuelva a subirse al IndyCar antes de acabar el año, sobre todo con el periodo de carreras de F1 y WEC que le viene por delante.