Eran las 11 de la noche en España cuando la noticia se conocía. El equipo Aston Martin había conseguido convencer a la FIA de que no había motivos para aplicarse la segunda penalización de 10 segundos ya que, el hecho de que el gato diera un pequeño toque al AMR23 de Fernando Alonso durante esos cinco segundos de cumplimiento de la primera sanción, no significaba que los mecánicos estuvieran trabajando sobre el monoplaza del piloto asturiano.
Prácticamente se daban dos hechos simultáneos, entre los documentos oficiales de la FIA aparecía en un primer momento la confirmación de su sanción antes de que la FIA reconociera el derecho de revisión de Aston Martin y que se diera a conocer que tras las evidencias presentadas los comisarios decidían retirarle la sanción y devolverle a Fernando Alonso su podio en el Gran Premio de Arabia Saudí.
El ovetense conseguía de forma definitiva su podio número 100 en el Campeonato del Mundo de Fórmula 1 y demostraba una vez más el ridículo de las decisiones acometidas por la FIA, la cual le había informado de una posible sanción de 10 segundos en los últimos minutos de carrera cuando el hecho se había producido en la vuelta 18, momento en el que el Aston Martin de Lance Stroll se detenía y propiciaba la aparición del Coche de Seguridad y la entrada en boxes de aquellos equipos que todavía no habían realizado su detención. Treinta vueltas para tomar una decisión que ya condicionaba el resultado de Alonso al dejarle sin ningún tipo de poder de reacción.
Extracto del comunicado de la FIA – Fernando Alonso:
Después de revisar la evidencia en video presentada y de escuchar al representante del equipo de
Aston Martin y a los miembros relevantes de la FIA, los comisarios determinaron que existía
evidencia nueva significativa y relevante según lo requerido por el artículo 14.1.1 para iniciar una
revisión de la decisión, en particular las pruebas en video y las pruebas verbales del Equipo y de la FIA.
Para nosotros estaba claro que el sustrato de la decisión original, a saber, la representación de que
había un acuerdo, fue cuestionado por las nuevas pruebas.
Por lo tanto, se procedió a conocer el fondo de la solicitud de revisión.
Habiendo revisado la nueva evidencia, llegamos a la conclusión de que no había un acuerdo claro, como
se sugirió anteriormente a los Comisarios Deportivos, en el que se pudiera confiar para determinar que las partes habían acordado que un gato tocando un coche equivaldría a trabajar en el coche, sin más. Dadas las circunstancias, consideramos que nuestra decisión original de imponer una sanción al coche #14 necesitaba ser revertida y lo hicimos en consecuencia.
Fernando Alonso. The Centurion. 💯#SaudiArabianGP #F1 @alo_oficial pic.twitter.com/pD4LPgzrNk
— Formula 1 (@F1) March 19, 2023