Se relanza la carrera deportiva de Fernando Alonso en la IndyCar… o por lo menos, la posibilidad de que siga adelante. Esto es lo que se deriva de unas recientes declaraciones de Zak Brown a Movistar+ en su canal de Fórmula 1. El director ejecutivo de McLaren confirmó que el asturiano probará un coche de la IndyCar la próxima semana y que lo hará con el equipo Andretti Autosport. El lugar será, evidentemente, Estados Unidos. Concretamente, será el circuito del Barber Motorsports Park, el que verá a Alonso subirse de nuevo en un coche del campeonato norteamericano que podría (o debería) ser su destino en 2019. La fecha prevista, el 5 de septiembre.
Aunque el objetivo de Fernando Alonso es estar en las 500 millas de Indianápolis para lograr el último elemento de la Triple Corona que le falta, el español quiere también sumar los campeonatos del WEC y la IndyCar para lograr su propia ‘doble’ triple corona (GP de Mónaco, 24 horas de Le Mans y 500 millas de Indianápolis por un lado y los respectivos campeonatos a los que pertenecen por el otro). La primera intentona americana llegó en mayo de 2017, con una participación esperanzadora de Alonso en la Indy 500 y muchas ganas de repetir. Una de las grandes dudas será ver con qué motor compite. Aunque la prueba con Andretti apunta a una posible relación con Honda, habrá que esperar para confirmarlo. Si la prueba se realizara con Harding como estructura técnica, entonces Alonso podría rodar ya con propulsor Chevrolet.
Para Fernando Alonso, el desafío de la IndyCar sería completamente distinto del de la edición de 2017 de las 500 millas de Indianápolis. Ante todo, por la diferencia de comportamiento entre los paquetes aerodinámicos de óvalo como el que usó en Indianápolis y de rutero como el que usará en el test de Barber. Adicionalmente, el coche sufrió un cambio de normativa aerodinámica entre 2017 y 2018, con unos coches que tienen una forma de pilotarse sensiblemente distinta de la del que conoce. Si todo va bien, el test debería ser el primer escalón camino a disputar la temporada 2019 de la IndyCar, en la que espera contar con buen material con el que pelear por el título.