La temporada 2017 de Fórmula 1 se ha caracterizado en el caso de McLaren Honda por ser complicada sobre todo en los circuitos donde el motor era más importante. En condiciones así, es difícil lograr buenos resultados aunque las manos estén a la altura. Esto es exactamente lo que le ha pasado hoy a Fernando Alonso con una retirada poco después de cruzar el ecuador del Gran Premio de Bélgica en una carrera para olvidar en un día en el que el asturiano sacó su genio al volante y su mal genio en la radio. La frustración se acumula en el cockpit del McLaren MCL32 con el dorsal número 14 en una temporada que debió haber supuesto un claro paso adelante a nivel técnico y que al final ha acabado siguiendo el camino opuesto al deseado.
La salida y las primeras vueltas fueron los mejores momentos de un Fernando Alonso que recordó sus mejores días en Ferrari con una gran arrancada desde la décima posición -ganó un puesto en parrilla por penalización a Jolyon Palmer por reemplazar su caja de cambios- hasta el séptimo puesto tras La Source. El bicampeón del mundo llegó a andar cerca de los Red Bull y aunque era evidente que no tenía máquina para atacarles, la imagen del McLaren justo tras los coches de la marca de bebidas energéticas era evocadora de otros tiempos. Desafortunadamente, el Gran Premio de Bélgica tenía preparado un baño de realidad para Alonso y para toda la Fórmula 1 con el objetivo de demostrar por qué un motor es importante aún cuando el ritmo a una vuelta es bueno.
En primera instancia Nico Hülkenberg dio cuenta de Alonso aunque este último logró recuperar su posición en un movimiento de calidad. El paralelo entre Alonso, Hülkenberg y un Esteban Ocon que venía desde atrás con más velocidad aún fue una de las imágenes de la carrera. Gracias a un buen posicionamiento y valor en la frenada, Alonso no solo se defendió del francés sino que recuperó la posición con respecto al piloto de Renault. Pudo haber aguantado en materia de tiempo por vuelta pero cuando el coche que le precede le supera en velocidad punta por tanta diferencia, es imposible protegerse en zonas como la que va entre La Source y Les Combes, este año totalmente a fondo.
Al final, los ataques de Hülkenberg y Ocon fueron meros formalismos, como también lo fueron los de Sergio Pérez y Romain Grosjean. En seis vueltas ya no quedaba ni rastro del genio del volante que había empezado la carrera. Traicionado por un coche que no le permitía pelear por objetivos más dignos, Alonso pasó a mostrar el ‘mal genio’ con respuestas que mostraban su enfado con la situación que está viviendo. Primero, que no le importaban las distancias con respecto a los rivales y que para él la carrera era un mero test. Luego, que no quería que le hablaran más en toda la carrera. El español perdía los nervios cuando el equipo le avisaba que Stoffel Vandoorne iba a pasar por boxes antes de que pudiera adelantarle en pista, aduciendo que el belga era el único coche que tenía opciones de adelantar en carrera.
La carrera prosiguió con cierta tensión hasta que Alonso anuncio después de haber parado a boxes y estar fuera de los puntos que tenía problemas en el motor y que tenían que retirarse. Situación extremadamente delicada en McLaren pues tanto si el motor falló como si fue el piloto quien decidió dar por acabada su participación en la carrera, la relación entre ambas partes parece tener difícil solución. Fernando Alonso dijo que decidiría tras el verano. Agosto termina y el Gran Premio de Italia no será favorable a McLaren o a Honda. Si los Grandes Premios de Singapur y Malasia no traen resultados aceptables, empieza a no ser descabellado pensar en un futuro que para Alonso no pase por quedarse en el equipo de Woking. Los rumores hablan de Williams. Él dice que tiene otras ofertas… ¿será en la Fórmula 1?
Hemos perdido la potencia de golpe, sin aviso. No obstante estaba siendo una carrera complicada para entrar en los puntos así que aunque es una pena, me quedo con la crono de ayer y con la salida y la primera vuelta. Ahora a intentar mejorar para la semana que viene en Monza aunque sabemos que el circuito no nos es favorable. Cada dos curvas me daban sugerencias sobre el reparto de frenada, diferencial, y luego me adelantaban en recta incluso antes de la zona de DRS así que tenía bastante trabajo y pedí que no me hablaran más.
