El regreso al circuito de Yas Marina ha dejado sensaciones extrañas en McLaren. Los pilotos del equipo de Woking han caído en la Q2, registrando ambos unos tiempos y posiciones ligeramente más discretos de lo que se había visto en las sesiones de libres. Fernando Alonso y Stoffel Vandoorne han quedado intercalados por el Renault de Carlos Sainz, en lo que es ya una lucha igualada en pista entre las escuderías inglesa y gala respectivamente.
Alonso iba a pasar a la Q3 de forma ajustada, en una zona igualada en la que también aparecían los Force India. Felipe Massa tenía otros planes y relegó al asturiano en su última vuelta, dejando a Alonso en la undécima posición de la parrilla de salida. La elección extra de neumáticos al no entrar en las diez primeras posiciones es un elemento crucial que el asturiano intentará aprovechar al máximo en la carrera.
«Hemos hecho lo que hemos podido. Todos los motoristas tienen ese botón mágico en la sesión de clasificación y nosotros siempre caemos algunas posiciones al final», declaró Alonso. «Por lo menos preferimos salir undécimos al poder elegir con qué neumático empezamos la carrera. Seremos vulnerables en las rectas pero después de eso tenemos que atacar para conseguir el máximo número posible de puntos».
La parte inicial de carrera será importante para las opciones de Alonso, que cree que el uso prolongado del ultrablando será importante. «Realizaremos la mayoría del stint con los neumáticos ultrablandos, que son los más rápidos de toda la gama. Ese es el objetivo, usarlos lo máximo posible. Si empezamos con ellos alargaremos la parada todo lo que podamos, si arrancamos con otro neumático se intentará quitarlo de encima rápidamente para montar los ultrablandos».