Podía parecer muy tranquilo para haber perdido su segundo podio de la temporada. Fernando Alonso había completado una carrera sin errores, desde el momento en el que se apagó el semáforo hasta que vio la bandera a cuadros, pero para sus intereses, el día no había sido sin tacha alguna ya que el más doloroso se produjo incluso antes de iniciar el Gran Premio de Arabia Saudí programado a 50 vueltas.
El asturiano colocó mal su AMR23 y a partir de ahí la historia parecía completamente escrita. Sin embargo, nunca llegó a rendirse. Consciente de esa sanción de cinco segundos inicial, Alonso peleó durante el primer stint por no soltar la estela de Checo Pérez y seguir construyendo esa ventaja clave sobre el Mercedes de George Russell y recibiendo por radio la situación de un Max Verstappen que llegaba desde atrás como un disparo.
Sabían que iban a ser en parte vulnerables si llegaba el neerlandés con la gran velocidad mostrada por el RB19, sin embargo, la carrera fue muy inteligente por parte del ovetense. Aprovechando su mejor salida para ponerse delante y después no perdiendo demasiado tiempo en un duelo con Checo que ya tenía ganador previamente escrito. El mexicano sabe que Jeddah es prácticamente uno de los trazados en los que más cómodo se encuentra y en los que puede marcar la diferencia y así se lo propuso.
Fue en la vuelta 18 cuando todo dio un vuelco. Desde el muro de Aston Martin le pedían a Lance Stroll que parase el coche inmediatamente, hasta el punto de que el ingeniero le llegó a decir un “on track” que parecía apuntar a que en el equipo, dentro del mal momento que siempre supone perder un monoplaza por fiabilidad, no vería con malos ojos que el Coche de Seguridad les pudiera echar una mano a que el golpe por la sanción en boxes fuera ligeramente menor, especialmente después de que los Ferrari ya se habían detenido en el pit-lane para hacer sus correspondientes cambios de gomas.
Todo parecía perfecto en la actividad de Aston frente al box, hasta que después de la carrera se volvió a ver con el ‘VAR’ de Mercedes-AMG F1 que realmente en la escudería de la marca de Gaydon habían cometido un error similar al de los de Dieppe de hace dos semanas. Un toque de uno de los mecánicos con el gato al monoplaza antes de tiempo y una sanción de 10 segundos que hacía polvo esas opciones de lograr el podio número 100 de Fernando Alonso, especialmente si se lo comunicas 32 vueltas después.
Sí, pudo subir al podio, regalar a los aficionados esa curiosa charla con Checo Pérez y Verstappen en el antepalco en la que parecía advertirles a los dos de Red Bull que no sería la última vez que le verían por allí. Incluso saboreó el espumoso y levantó el trofeo. Todo ello antes de que le confirmaran su penalización de 10 segundos y el paso atrás en la clasificación para dejar el tercer puesto a George Russell y Mercedes.
Me da igual, si me lo llegan a quitar antes de subirme al podio me hubiese dolido más, pero tras la celebración, con el champán, con todos nuestros sonsors en el podio… pues me duele menos. 35 vueltas que tuvieron para pensar la penalización y no les dio tiempo, según parece. Estamos mirándolo ahora porque el equipo no está de acuerdo, no ve la penalización y a ver lo que pasa al final, pero bueno, que me quiten lo bailao. La FIA no ha quedado muy bien, ha tenido una hora para decir la penalización y no… lo han hecho todo un poco mal – Fernando Alonso
“Que me quiten lo bailao” suele decir el lenguaje coloquial en España, pero un podio sigue siendo un podio, especialmente para un Fernando que reconoció que lo importante era sumar el máximo de puntos en cada Gran Premio para el equipo… algo que en Jeddah se saldó sólo con su cuarta posición que pudo ser un tercer puesto.
Aunque el final ha sido doloroso, la tranquilidad para el equipo es que en dos citas y dos circuitos tan distintos como los son Sakhir y Jeddah, el AMR23 ha sido competitivo y ha constatado sus condiciones para pelear por los podios. Prácticamente el único factor común ha sido la noche, así como la dificultad para situar en qué punto de rendimiento están principalmente los Mercedes y los Ferrari, porque la respuesta sobre dónde está Red Bull Racing parece ya más que respondida.
Si me llegan a decir que teníamos diez segundos de penalización, habría tirado más y le habría sacado 11 o 12 a Russell. Podía más, pero como no habían dicho nada era una carrera de controlar un poco a Mercedes y a Ferrari y aun así éramos más rápidos que ellos. Duele un poco no estar en el podio, aún no lo he asimilado, estoy con un muy buen sabor de boca. El objetivo de este fin de semana era ver más que nada cuán competitivos podríamos ser aquí, en un circuito muy diferente a Bahréin. Éramos el segundo coche más rápido y hemos controlado bien a los Ferrari y a los Mercedes en todo momento e incluso hemos podido aumentar la distancia – Fernando Alonso
Fotos | Pirelli