No es la primera vez que vemos cómo Ferrari expresa su malestar con los responsables de la Fórmula 1 advirtiendo sobre su posible salida. Los de Maranello no han sido los únicos que han recurrido a esta estrategia durante los últimos años, sin ir más lejos, Red Bull amenazó con su marcha hace apenas dos años, cuando los de Milton Keynes no encontraban motorista tras su fuerte ‘pelea’ con Renault por el rendimiento de los motores galos. Campeonatos paralelos, posibilidad marcharse a Le Mans u otras muchas opciones que se establecían como una alternativa posible en los futuros de los distintos equipos que decidían tirarse el farol.
En el caso de Ferrari, es difícil entender la Fórmula 1 sin ellos y viceversa, por lo que cada vez que se pone sobre la mesa la opción de que abandonen el Gran Circo, la noticia copa portadas en toda la prensa especializada y deportiva. En este caso, Liberty Media ya puede presumir que ha conseguido lo de sus predecesores, después de que los de Maranello hayan avisado sobre su salida en 2021 si no se mantienen sus privilegios o su estatus de marca histórica cuando haya que firmar el próximo Pacto de la Concordia.
Recordemos que una de las propuestas por parte de Liberty es la de una redistribución de los beneficios, incluso afectando a los extras que se llevan equipos históricos como Ferrari en base a su papel protagonista durante las últimas décadas en el campeonato. Tampoco los italianos quieren ni oír hablar de estandarizar ciertas partes muy importantes de los monoplazas con el objetivo de reducir la brecha entre los equipos. No es algo nuevo, recordemos que durante los últimos meses Marchionne se lamentó de que a pesar de que la Fórmula E presentaba un panorama muy atractivo, Ferrari seguía sin interesar unas series con un reglamento técnico con tan poca libertad.
Liberty tiene varias buenas ideas, como rebajar los costes, lo cual creo que es positivo. Pero hay un par de cosas en las que no estamos de acuerdo. Entre ellas que no haya cierta independencia para diferenciarse en realizar el tren motriz del coche no es tolerable para Ferrari. De seguir así en 2021 Ferrari tomará decisiones si lo que se decide no es beneficioso para la marca y su mercado. Si es así, Ferrari no jugará. Lo que sí sé es que la Fórmula 1 es parte de nuestro ADN desde el día en que nacimos. No podemos definirnos a nosotros mismos de manera diferente. Pero si cambiamos todo hasta el punto en el que se vuelva irreconocible, no querremos jugar más. No quiero estar en una especie de NASCAR global, simplemente no quiero.