Buongiorno Maranello. Eran las 6 y media de la mañana y a más de uno ha despertado en la lejanía el sonido de la vida, esa misma vida que para la región supone el motor de la industria automotriz y del automovilismo. Un corazón rojo Ferrari volvía a latir después de semanas de tristeza y luto. El honor ha correspondido a Charles Leclerc, con el monegasco haciendo una ceremonial salida desde la Officina Classiche de la fábrica al volante del SF1000 y bajo la atenta mirada de los Carabinieri que se han asegurado de que nada pudiera estropear el momento.
Después de cruzar una Via Abetone Inferiore desierta, el SF1000 pasó frente a la Gestione Sportiva en Via Enzo Ferrari 27, donde todos los coches de Fórmula 1 de la Scuderia han sido diseñados, construidos y desarrollados desde 2015. Charles saludó al Museo Maranello, hasta llegar a la Via Gilles Villeneuve en su camino hacia el legendario Fiorano. Desde algún lugar, Enzo Ferrari, junto a otros incondicionales de la marca a buen seguro observaban atentos esta puerta en marcha. Tras las gafas oscuras de «il commendatore» una mirada de emocionado orgullo, testigo de la fortaleza de eso que creó con toda su ilusión y esfuerzo, que con el paso de los años se ha convertido en una religión.
Era lo más parecido a una arenga automovilística al espíritu de todos los que han vivido afectados por el virus, un gesto de que poco a poco estamos recobrando nuestra libertad, de que el cavallino rampante vuelve a cabalgar libre 110 días después de que se dieran por finalizados los test de pretemporada en el Circuit de Barcelona-Catalunya.
Segundo equipo que rueda con el coche de 2020:
Leclerc se convierte junto a Ferrari en el segundo equipo que ha podido rodar con su monoplaza de este año después del parón al que ha sometido el COVID-19 a la competición después de que ayer hiciera lo propio Racing Point con su RP20 y Lance Stroll en Silverstone, con los apenas 100 kilómetros que permite la reglamentación para los Filming Days.
Situación muy distinta a lo que ocurre con McLaren, la cual ha salido hoy a rodar también sobre el asfalto mojado del circuito británico, pero en este caso con Lando Norris y Carlos Sainz Jr. al volante de sendos F3 de Carlin debido a las dificultades que tienen a la hora de utilizar uno de los monoplazas de 2018 tal y como han hecho Renault y Mercedes-AMG F1. Sin propulsores Honda disponibles, los de Woking no pueden hacer funcionar uno de los coches bajo la normativa híbrida para quitar el óxido a sus pilotos cuando apenas queda medio mes para el inicio de la temporada 2020 de la Fórmula 1.
. @Charles_Leclerc driving the SF1000 in Maranello today 🔥
🎥 : nicola_marcia21#F1 #Charles16 pic.twitter.com/XINjIX2qEa
— Charles Leclerc Fan Page (@LeclercNews) June 18, 2020