Tras lo sucedido este fin de semana en el Gran Premio de Qatar, la FIA anunciaba este martes que un interlocutor había abierto conversaciones con Lance Stroll ante lo que en principio podría ser un comportamiento que iría en contra las reglas y procedimientos que dicta el máximo organismo rector del automovilismo internacional. Se abría un momento de incertidumbre acerca de si esto podría deparar en una sanción deportiva o incluso en repetirse el hecho que ya se vio con el empujón dado por Max Verstappen a Esteban Ocon durante el Gran Premio de Brasil, algo que le costó al neerlandés algunas horas de servicios comunitarios.
El canadiense fue visto a través de las imágenes de la señal internacional dando un empujó a su entrenador/fisioterapeuta después de quedar fuera en la Q1 de la clasificación realizada el pasado viernes en el Circuito de Losail. Tras arrojar el volante de su AMR23, Stroll hizo caso omiso de las indicaciones de Henry Howe, el cual le señalaba que debía pasar por el parque cerrado para ser pesado.
Tras este incidente y, a pesar de que el propio Stroll dijo en un primer momento que su relación con Henry era más que buena y que no había nada más en ese momento de tensión, el piloto norteamericano ha recibido una advertencia por escrito por parte de la FIA, con Lance además disculpándose después de lo sucedido. La propia Federación ha reiterado que tienen «una posición de tolerancia cero contra las malas conductas y condena cualquier acción violenta».
El comunicado de la FIA no ha incidido más en el asunto y se ha limitado a resumir lo sucedido: «la FIA recibió una disculpa de Stroll por sus acciones durante el GP de Qatar. Tomando nota de ello, se emitió una advertencia por escrito, recordando a Lance sus responsabilidades según el Código de Ética de la FIA y otras pautas éticas y de conducta de la FIA establecidas en las reglas deportivas».
Foto | Aston Martin F1