Cuando el río suena, agua lleva. Y cuando la fuente es e-racing365 implica aún mayor fiabilidad. La Fórmula E se ha convertido en tierra prometida para los grandes fabricantes, pero hasta ahora echaba en falta presencia japonesa y norteamericana. Nissan sustituirá a Renault la próxima campaña y tanto Honda como Toyota se han interesado, pero por parte de Estados Unidos seguía faltando una marca. Ahora todo apunta a Ford.
Nada más conquistar las 24 Horas de Le Mans de 2016 con el nuevo Ford GT la marca de Detroit quiso dejar claro que su compromiso con el Mundial de Resistencia se extendería hasta 2019. Pero eso queda ya a la vuelta de la esquina, por lo que es hora de pensar en el siguiente proyecto. Y aunque no le hacen ascos a los posibles ‘GTP’ en la categoría reina de Le Mans o a un DPi, la Fórmula E les atrae mucho. Según e-racing365, responsables de la marca ya han tratado con Alejandro Agag y Dragon Racing sería un buen socio para empezar como estructura satélite.
Recordemos que al romper su acuerdo con Faraday Future, Dragon Racing es de los pocos equipos independientes que sobreviven en el campeonato y es propiedad de Jay Penske, hijo de Roger y por lo tanto con los contactos necesarios para tratar de tú a tú con Ford. El otro socio mencionado por e-racing365 es Virgin Racing, cuya aproximación a Honda parece haber caído en saco roto y los rumores colocaban con un motor Audi cliente la próxima temporada.
En todo caso la llegada de Ford a la Fórmula E supondría un importante cambio de estrategia no sólo en la marca del óvalo azul sino en toda la industria del automóvil estadounidense, que lleva más de una década lejos de embarcarse en proyectos punteros en el automovilismo deportivo, prefiriendo centrarse en certámenes menos costosos y exigentes a nivel tecnológico como la Fórmula 1 o la categoría LMP1 del Mundial de Resistencia. ¿Estarán a la altura?
Foto | Michelin – DPPI