Franz Tost es uno de los jefes de equipo que más tiempo lleva en su actual posición en el paddock y cuenta con la experiencia de haber visto el crecimiento y consolidación de Toro Rosso. Él y Christian Horner son los líderes de los equipos de Red Bull y el austriaco cuenta con un nuevo doble cambio de alineación para 2019 que debería servir de acicate para una escuadra dañada por la discutible fiabilidad de la pasada temporada. Tost se ha atrevido con todo, no solo con el posible rendimiento de su Toro Rosso, sino con el devenir de sus pilotos, sus habilidades e incluso la meteorología de los test.
«Tuvimos problemas en 2018, esperábamos que fuera un año complicado. El diseño del coche de 2019 es más completo que en 2018, tenemos más tiempo para trabajar con Honda», comenta un Tost optimista. «Creemos que estamos más cerca de la zona media que en años precedentes, pero no sabremos del todo rendimiento hasta comprobar las bondades de nuestro pack. Cada segundo que el coche no está en pista es una pérdida de tiempo, estar en el circuito es bueno ya que en casa no se hace nada útil».
La confianza en un piloto nuevo es vital para que éste rinda y Tost confía en las capacidades de Alexander Albon, miembro pretérito del Red Bull Junior Team que se estrena en Fórmula 1 sin apenas rodaje. «Es un desafío que queremos tomar, somos optimistas con el rendimiento de Alex porque muchos miembros del equipo le conocen y le hemos seguido de cerca. Mañana rodará por segunda vez con este coche, ya hizo el shakedown la semana pasada en Misano».
Daniil Kvyat está de vuelta en su tercera oportunidad para el equipo de Faenza y su jefe le defiende frente a las posibles críticas. «Kvyat es un piloto muy preparado, entró en una época en la que nuestros coches eran frágiles y se defendió bastante bien. Su trabajo en el simulador de Ferrari será útil». La comparativa entre Kvyat y Pierre Gasly no es justificable para Tost por su distinta preparación. «Kvyat subió directamente de GP3 a F1, un paso muy difícil en sí mismo. Gasly tuvo una ‘educación’ distinta en su ascenso, pudo prepararse durante años en la Fórmula 3.5, GP2 y Super Fórmula y en categorías de mayor prestigio».
Se mostró descontento Tost respecto a la aerodinámica imperante en la F1 y el austriaco defendió un estilo más old school al pedir la reducción de la misma. «El principal motivo por el que se cambian las reglas es para facilitar los adelantamientos. No sé si se conseguirá este objetivo pero las velocidades en curva son muy altas y hay que reducir la aerodinámica para que los coches puedan seguirse entre ellos más fácilmente. La FIA tiene la última palabra respecto a este reglamento de cara a 2021, por ahora solo podemos esperar», explicó.
La edad de Tost también se reflejó en su carácter mencionando a los jóvenes pilotos. «Los pilotos actuales empiezan a correr en karting con seis o siete años y llegan a Fórmula 1 con 19 o 20. Su pilotaje se pule en todo este tiempo, el problema no es ese sino el entorno. Algunos lo tiene difícil porque no trabajan con ingenieros, tienen que acostumbrarse a eventos publicitarios y controlar el nivel de cansancio para rendir bien en pista».
El punto cachondo llegó cuando reafirmó su voluntad por ir a Baréin en lugar de en Montmeló. «Aquí hace un jodido frío por la manaña, prefiero el sol. En Montmeló podemos obtener datos con una temperatura de pista completamente distinta a la que habrá en Melbourne, en Abu Dabi o en Baréin tendríamos una mejor idea de lo que encontramos normalmente en las carreras», explicó Tost.